“El gremio de arquitectos debe dialogar con la sociedad para brindar solución a los problemas del modelo urbano de Lima”, dijo el arquitecto Jorge Ruiz de Somocurcio. Este es el objetivo de la segunda edición de la Bienal Internacional de Arquitectura y Urbanismo de Lima y Callao (BiaLIMA 2023), el evento que reúne a algunos de los nombres más destacados de la arquitectura mundial para reflexionar sobre el rol de la arquitectura para el buen vivir individual y colectivo.
El evento es organizado por la Regional Lima del Colegio de Arquitectos del Perú (CAP-Lima) y y se realizará en el Centro Histórico de Lima hasta el 13 de octubre. La Bienal se divide en 4 ejes temáticos que reúnen las claves para cambiar nuestra forma de entender la urbe donde vivimos y contribuir a su desarrollo armonioso: Ciudad compacta; Economía Circular y Sostenibilidad; Cómo Hacer Mejores Ciudades; y Vivienda Social.
“La pandemia reveló la precariedad del modelo urbano de desarrollo de muchas ciudades. Frente a ello, muchas de ellas colapsaron, como Lima. Esperamos que la BiaLIMA nos sirva para comprender cómo se puede recomponer una ciudad después de una gran crisis”, expresó Ruiz de Somocurcio, presidente del evento y decano del CAP-Lima.
En el primer día de la BiaLima 2023, se desarrollaron 8 actividades entre conversatorios, presentaciones y premiaciones a partir de la temática ‘Ciudad compacta’. Este concepto describe a las ciudades que se caracterizan por una mayor densidad poblacional y una menor dispersión geográfica en comparación con ciudades más extensas.
En el conversatorio central, que se llevó a cabo en la plazuela Rosa Merino del Teatro Municipal, participaron el arquitecto chileno Felipe Vera y el venezolano Gabriel Visconti, dos de los catorce expositores internacionales de renombre que se encuentran en Lima con motivo de la bienal.
Acerca de la discusión sobre las ciudades compactas, en contraste con el concepto de ciudades expandidas, Felipe Vera afirmó que las metrópolis deben seguir el modelo desarrollo compacto. En esa línea, Vera expuso cuatro factores en materia de planificación urbana que merecen ser atendidos: crecimiento demográfico, cambio climático, migración e informalidad.
Otro invitado internacional es el arquitecto Daniel Alsina (España), quien lidera la oficina técnica del Ayuntamiento de Barcelona que se encarga del proyecto ‘Supermanzana de Barcelona’. Este es el proyecto urbanístico más importante en la historia de la ciudad catalana desde su transformación para albergar los Juegos Olímpicos de 1992.
“La principal característica de una supermanzana es que una de cada tres calles sirva principalmente para una movilidad fácil y atractiva para los peatones. A estas vías también se incorporan áreas verdes. En las otras dos calles pueden circular los coches y el transporte público”, declaró Alsina en diálogo con El Comercio.
“Lima es una ciudad compacta como Barcelona y tiene las condiciones perfectas para aplicar este modelo de diseño urbanístico. Los peruanos deben reflexionar sobre la necesidad de dar más importancia al peatón y mejorar la estructuración del transporte público. Por ejemplo, se debe acelerar la construcción de las líneas de metro que están haciendo”, subrayó.
Velar por nuestro patrimonio: tarea de todos
La jornada inició con el foro ‘Testigos de Nuestra Historia. La Valoración del Patrimonio Cultural’, evento organizado por el Proyecto Especial Bicentenario y el CAP en la sala Alzedo
En el primer bloque, titulado ‘Patrimonio e identidad cultural al bicentenario’, los ponentes reflexionaron acerca del patrimonio cultural como elemento de integración e identidad cultural. A través de un video, la arquitecta italiana Olimpia Niglio desarrolló su participación alrededor del concepto de “la cultura del encuentro”. La también profesora de la Universidad de Pavía resaltó el artículo 216 de la encíclica Fratelli tutti del Papa Francisco, donde se resalta el carácter popular de la cultura como aquello que “está presente en las convicciones más entrañables de un pueblo y forma parte de su estilo de vida”.
En ese sentido, Niglio destacó que la cultura permite el diálogo entre los diferentes ciudadanos de “una sola casa común donde vivimos”. “Por eso, todos debemos preocuparnos por el conjunto de bienes materiales e inmateriales considerados como patrimonio histórico del mundo. Debemos hacerlo juntos sin distinciones sociales, porque la cultura nos incluye a todos”, sostuvo.
En el segundo bloque, titulado ‘Patrimonio y ciudades al bicentenario, Luis Martín Bogdanovich, gerente de Prolima, el órgano de la Municipalidad de Lima encargado de la recuperación del Centro Histórico de la capital, destacó la importancia de la visión, planificación y continuidad como pilares del desarrollo de un proyecto ligado al patrimonio histórico.
“Esto ha caracterizado al Plan Maestro para la recuperación del valor cultural y turístico del Centro Histórico de Lima desde que el proyecto se formuló por primera vez en enero del 2017. Esto se aplica en Lima, pero también podría realizarse en otros centros históricos del país. Para ello, es necesario implementar órganos de gestión como Prolima″, subrayó.
Por la tarde, en el Teatro Municipal, se otorgó el premio del segundo concurso nacional a la excelencia de tesis de pregrado en arquitectura. Cinthya Lozada y Daniela Gomero, egresadas de la Universidad de Lima, fueron reconocidas por el trabajo ‘Manzana productiva y vivienda de interés social para los damnificados de El Niño Costero en Cura Mori’.
El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, también participó de las conferencias magistrales en el Teatro municipal. Invitó al CAP-Lima a incrementar el diálogo y los convenios con la Municipalidad de Lima para encontrar soluciones conjuntas a los problemas del desarrollo urbano de Lima.
Puedes conocer el programa completo de las siguientes jornadas y adquirir las entradas en la web de la Bienal.