Al menos 10 instituciones vinculadas al transporte de Lima y Callao son las que actualmente intervienen en cada proyecto vial de la ciudad.
Pro Transporte, Rutas de Lima, Ositrán, Provías, los ministerios de Economía y Transportes, el Instituto Metropolitano de Planificación y la Empresa Municipal Administradora de Peaje de Lima, sin contar con las gerencias de transporte distritales y regionales, participan en la ejecución de estas obras.
Una de las consecuencias es el retraso en los procesos. En la línea 2 del metro, que se encuentra al 13% de su ejecución y planea concluirse en el 2021, intervienen cinco entidades, entre ellas, la Municipalidad de Lima, la Autoridad Autónoma del Sistema Eléctrico y el Ministerio de Vivienda.
Esta problemática llevó al Ministerio de Transportes, en julio pasado, a elaborar un proyecto para crear una sola autoridad para Lima y Callao que tenga bajo su cargo todas las obras viales. Ayer, el Congreso informó que se aprobó por unanimidad el proyecto de ley que declara de necesidad pública la creación de una autoridad única de transporte.
“Este primer paso demuestra que hay voluntad política. Ahora todo está en manos del Ejecutivo y del pleno del Congreso para su aprobación final”, informó el congresista Carlos Bruce. El parlamentario dijo que, de crearse esta entidad, “ningún municipio podrá crear más ‘by-pass’ sin estudios”, aludiendo a la propuesta de la comuna de Lima de ejecutar hasta 18 pasos a desnivel.
Este ente rector articularía y supervisaría el transporte urbano y público, y las obras viales, en Lima y Callao. Se informó que las gerencias de transporte distritales perderían algunas atribuciones.
El vicepresidente de la República y ministro de Transportes y Comunicaciones, Martín Vizcarra, dijo que la autoridad única del transporte priorizará destrabar la ejecución de las próximas líneas del metro, el anillo vial norte, la vía costanera y la Vía Evitamiento que irá desde la Carretera Central hasta el Callao. “Actualmente hay muchas autoridades y no sabemos quién manda. Pero con una sola línea gerencial, con base en estudios, no podrá haber discusiones”, dijo.
Para Roberto Goméz, alcalde de Surco, uno de los distritos más grandes de Lima, el principal desafío de la autoridad única será mantener la autonomía del directorio alejada de posiciones políticas o vecinales que afecten la visión integrada de la ciudad, y conseguir urbanistas capaces de planificar el transporte. “Permitirá centralizar las rutas y corredores, fiscalización y las obras de infraestructura. Actualmente cada distrito tiene su sistema de semaforización, rutas e inspectores”, anotó.
El municipio de Lima también se mostró a favor de este proyecto, pero instó a que esta no sea una entidad burocrática más. “La autoridad única es importante porque buena parte de la población se moviliza entre Lima y Callao. No estamos en contra. Pero esta debe ser una autoridad ágil, eficiente y técnica, y vamos a tener que modificar normas y leyes”, dijo Álvaro Castro, gerente de Transporte Urbano.
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