La clausura definitiva de imprentas que funcionaban sin licencia en el Centro Histórico de Lima generó actos de violencia por un grupo de comerciantes que se oponen a esa medida.
Trabajadores y dueños de las imprentas que se dedican a esta actividad se enfrentaron a la Policía Nacional, agredieron a miembros del serenazgo de Lima y causaron destrozos en una patrulla municipal. Aseguran que con cierre de locales cientos de personas se quedarían sin trabajo.
Según la Municipalidad de Lima, el retiro de las imprentas responde a la disposición legal municipal que prohíbe la actividad gráfica en esa zona.
Luis Gayoso, gerente de Desarrollo Económico de la comuna limeña, precisó los empresarios de los jirones Chancay, Cañete y Angaraes fueron notificados reiteradamente, desde el 25 de mayo, para que procedan a dejar la zona; ante la negativa se procedió con la colocación de tranqueras en las galerías y soldado de algunas entradas de los negocios.
Val indicar que tras el operativo, realizado durante la madrugada, algunos trabajadores quedaron encerrados en las galerías.
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— Sociedad El Comercio (@sociedad_ECpe) junio 17, 2015
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