Eva Bracamonte: "Todavía no me acostumbro a mi libertad"

Apenas Eva Bracamonte Fefer nos abre la puerta de su departamento, sus inseparables perras mestizas Lola y Zezé se colocan delante suyo como si intentaran proteger a su dueña. Esta será la primera vez que la joven de 28 años, recientemente absuelta de cometer el crimen de su madre Myriam Fefer, ocurrido el 15 de agosto del 2006, concede una entrevista a la prensa.

La noche anterior a la lectura del último juicio, la protagonista de los uno de los casos policiales más mediáticos de los últimos tiempos confiesa haber sentido muchos nervios y haberse muerto de miedo.

“Era inevitable pensar que fácil ese martes 29 de diciembre del 2015 se me podía acabar la vida. Hablaba un montón con mi mamá y con Dios”, nos cuenta exactamente diez días después de que la Corte Superior de Justicia la declarara inocente del delito de parricidio.

Para Eva Bracamonte Fefer se hizo justicia con su absolución, más no con el caso. “Para mí, justicia sería saber qué pasó con mi madre y eso es algo que nadie me ha dado”.

Por otro lado, la joven se negó a señalar a su hermano Ariel Bracamonte como el principal sospechoso del crimen de su mamá. “Yo no voy a hacer con nadie lo que el Perú entero ha hecho conmigo en algún momento. Yo no sé si él es el responsable, no es mi trabajo descubrirlo ni investigarlo”, señaló.

Asimismo, no descartó una futura reconciliación. “En el momento en que él decida, si es que eso sucede algún día y quiere acercarse, yo voy a estar aquí. No le voy a cerrar las puertas”.

Finalmente, dijo estar convencida de que su caso no se hubiese convertido en novela si es que el sistema de justicia peruano, como ella misma califica, no fuese homofóbico.

“A Liliana y a mí nos han hecho un interrogatorio para determinar nuestro comportamiento sexual y nuestra tendencia a cometer actos delictivos. Así, literalmente como te lo estoy diciendo”, reveló esta joven que aún no tiene planes definidos para empezar a reconstruir su vida. Por lo pronto, Eva disfrutará el verano en la playa. “Todavía no asimilo mi libertad”, remató.

¿Con ganas de leer la entrevista completa? No te la pierdas en nuestra edición de mañana. 

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