Con el uso del grillete se busca reducir el hacinamiento en las cárceles. (AP)
Con el uso del grillete se busca reducir el hacinamiento en las cárceles. (AP)
Redacción EC

Con el uso del grillete se busca reducir el hacinamiento en las cárceles.  El Instituto Nacional Penitenciario () colocó ayer el decimosexto grillete electrónico a una interna sentenciada por el delito de robo agravado, quien purgaba condena en el Penal de Mujeres de Chorrillos.

La interna, de 32 años, fue trasladada a su domicilio de Barranco por disposición del Poder Judicial, donde se evaluó su solicitud. Según el INPE, permanecerá en su casa porque no ha pedido permiso para trabajar.

“Esta alternativa a la pena privativa de libertad, permite beneficiar a aquellas personas que no representan un riesgo para la sociedad”, sostuvo el presidente del Concejo Nacional Penitenciario, Carlos Romero.

El objetivo del uso del dispositivo electrónico es reducir el hacinamiento de las cárceles. De acuerdo al INPE, el uso del grillete solo procede para los internos que hayan recibido penas de hasta ocho años de prisión. Se priorizan los pedidos de los internos mayores de 65 años, que padecen enfermedades graves, discapacidad física permanente, mujeres con hijos menores de 3 años, entre otros.

El primer grillete fue colocado en julio del 2017 a Sara Salazar, quien debía cumplir una condena de cuatro años. 

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