Esta mañana, un grupo de padres de familia, cuyos hijos fueron diagnosticados con insuficiencia renal crónica terminal, y otros pacientes que sufren la misma enfermedad realizaron un plantón en los exteriores de la sede del Ministerio de Salud (Minsa), ubicada Jesús María.
Ellos reclamaron que ahora recibirían tratamiento de hemodiálisis en clínicas, luego que el convenio entre el Hospital Nacional Cayetano Heredia y el sector haya finalizado.
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“Solicitamos que se fortalezca el servicio de hemodiálisis del hospital Cayetano Heredia y no se les pretenda transferir al sector privado, a clínicas que no les garantizan atención integral y servicios especializado”, señaló uno de los progenitores para Latina.
Ante esta situación, las autoridades del Ministerio de Salud (Minsa), encabezadas por el viceministro de Prestaciones y Aseguramiento en Salud, Dr. Alfredo Broggi Angulo, se reunieron con la Asociación de Pacientes con Insuficiencia Renal Crónica Terminal para informarles que la cobertura y atención de salud de los pacientes está totalmente garantizada.
“Ante la preocupación de los padres de familia por el cese de un convenio con una universidad privada, las autoridades del hospital Cayetano Heredia han informado que continuarán brindando la atención y diálisis a los once niños que seguían su tratamiento, y que no serán referidos a otras clínicas privadas”, afirmó el viceministro.
El funcionario precisó que los 11 niños no serán referidos a otras clínicas. En tanto, respecto a los pacientes adultos con insuficiencia renal crónica terminal, explicó que la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) velará por la calidad de atención que reciben en los centros de hemodiálisis.
“Estamos priorizando la salud de los menores y recogiendo la preocupación de sus padres, de saber que en el Hospital Cayetano Heredia cuentan con todos los especialistas en cardiología, infectología y nefrólogo pediátrico, les hemos dado la tranquilidad de que su tratamiento de diálisis continuará de forma indefinida en el hospital”, aseguró.
Por su parte, Carlos Acosta Saal, superintendente Nacional de Susalud, señaló que es necesario trabajar de la mano con los pacientes para poder fiscalizar la atención y que se cumplan los protocolos de bioseguridad. “La elección de un centro de hemodiálisis pasa por una licitación, donde se evalúa no solamente el costo, sino la calidad de atención y ella se mide con la satisfacción o no que tengan los pacientes”, afirmó.
Por su parte, los representantes de la Asociación de Pacientes con Insuficiencia Renal Crónica Terminal mostraron su confianza en las medidas que adoptará el Minsa para fortalecer la atención y acordaron una próxima reunión para el 21 de octubre y de esta forma conocer los avances y acuerdos en beneficio de los pacientes.