En el Hospital Hipólito Unanue falleció el niño de 4 años que fue alcanzado por una piedra, tras las explosiones de una empresa informal de construcción en el cerro situado detrás del asentamiento humano Túpac Amaru, Ate Vitarte.
El menor no superó el coma en que cayó desde el sábado último cuando “una verdadera lluvia de piedras” cayó en el citado sector, según los vecinos de la zona.
Durante los últimos días, la baja presión y frecuencia cardíaca que presentaba J.E.G.Y. complicó su estado, según se confirmó a El Comercio desde el referido nosocomio. El martes pasado, el padre del pequeño, Giovanni Guadalupe Orozco, declaró que los médicos ya le habían dado pocas esperanzas de vida al menor.
El accidente se produjo luego de que el obrero Juan Villacorta Mendoza realizara las detonaciones sin las medidas de seguridad necesarias para proteger a los vecinos del sector. Ignacio Saavedra Monzón, quien contrató personal para aplanar el terreno de su predio y ganar espacio al cerro, confirmó que el trabajador fue detenido.