Con un Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) entre la espada y la pared, los gremios de autos colectivos y transporte multimodal han logrado la formalización de este transporte en todo el país, menos Lima Metropolitana y Callao, y siguen poniendo en agenda sus reclamos.
El martes 5 de abril se publicó el reglamento del servicio temporal de transporte terrestre de pasajeros en automóvil colectivo que establece requisitos técnicos y de operación para que estos puedan recorrer las carreteras del país. Esto, según especialistas consultados, es un golpe al transporte y seguridad vial en el Perú.
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“Todos los escenarios [tras esta reglamentación] se muestran negativos, no se puede ser optimista. Lo primero que vamos a ver es el crecimiento de la informalidad en el transporte y se va a extender a otros rubros”, dijo Franklin Barreto, coronel PNP (r), que fue jefe de la Unidad de Investigación de Accidentes de Tránsito de la Policía Nacional.
Pero la reglamentación no ha sido suficiente para los colectiveros y todavía piden, en reuniones con el MTC y paros, la legalización sin restricciones, amnistía para infractores, reducción de requisitos para brevetes, cambios en la Sutran y Autoridad de Transporte Urbano (ATU) y declarar en emergencia el transporte terrestre, entre otros.
Todo esto puede generar todavía más caos en el transporte terrestre nacional, indican los especialistas: más accidentes de tránsito, más informalidad, más caos vehicular y tráfico. “Están solicitando que se declare la emergencia porque ahí van a pedir que se cambien las reglas de Sutran y ATU para debilitarlas, porque quieren meter autos colectivos en Lima y Callao”, dijo Martín Ojeda, gerente general de la Asociación de Transporte Interprovincial de Ómnibus.
Además, explicó que los autos colectivos generan una competencia desleal para el transporte formal que trabaja cumpliendo la norma. “Se ha tenido alcance a audios y videos y ellos [colectivos] tienen asegurados que no van a ser materia de operativos. Yo pongo mis buses en puntos de control y los colectivos pasan al costado y nadie dice nada”, sostuvo.
Sobre la informalidad, Lino de la Barrera, especialista en transporte y gerente general de Kunay Legal, explicó que la reglamentación que se ha hecho sobre los colectivos es casi imposible de cumplir, entonces se formalizará a algunos pocos, pero todo el resto seguirá operando de manera informal y aumentarán.
Seguridad vial
La formalización de colectivos también generará más inseguridad vial en las zonas donde operen. La actividad del colectivero se basa en más velocidad, más vueltas y por ende más pasajeros. “Vamos a ver lo que se conoce como la guerra del centavo”, indicó el coronel (r) Barreto.
“Los niveles de velocidad no van a bajar porque Sutran no tiene los mecanismos para controlar la velocidad ni con los formales. Van a tratar de dar la mayor cantidad de vueltas sin que les interese la seguridad. La cantidad de accidentes va aumentar”, agregó. Esto teniendo en cuenta que en el Perú más de 14 000 personas fallecieron en accidentes de tránsito en últimos cinco años y la mayor causal es la alta velocidad.
La reglamentación indica que si un viaje dura más de cinco horas, deben ir dos conductores. Pero los especialistas son escépticos con esto. De la Barrera explicó que si el viaje lo hace una minivan, por ejemplo, tendrían que dejar de vender un pasaje para que haya espacio para dos conductores. “Es irreal para el escenario que tenemos de colectivos que se pretende regular”, sostuvo.
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Paraderos informales
A inicios de marzo, El Comercio reveló una red de corrupción de la policía donde al menos cinco agentes de tránsito, cuya labor era erradicar paraderos informales, fueron retirados “por no colaborar” en los paraderos “de los jefes”, sostuvieron. Estos paraderos se encontraban en Puente Nuevo, Atocongo, Primavera, Alipio y Caquetá que tenían carriles completos ocupados por minivanes.
En un nuevo recorrido esta semana, El Comercio pudo comprobar que continúan los autos colectivos en estas zonas, pero en menor cantidad. Sin embargo, la presencia policial seguía siendo casi nula.
En el puente Alipio, colectivos recogen a pasajeros en la mitad de la calle. (Foto: Jorge Cerdán)
Colectivo invade la vereda para que pasajero pueda bajar en puente Atocongo.
Varias minivanes esperan en Puente Nuevo para hacer taxi colectivo.
En puente Alipio mujer sube a un colectivo que se dirige hacia Chilca. Los puentes son grandes paraderos de los colectivos por el fácil acceso a la carretera.