El próximo 18 de enero Lima cumplirá 485 años de fundación española. A lo largo de su historia la capital del país ha pasado por diferentes etapas, desde la época prehispánica hasta la actualidad. El historiador y docente de la Universidad de Lima Juan Luis Orrego conversó con El Comercio y comentó el proceso de transformación que ha atravesado la Ciudad de Los Reyes.
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En primer lugar, precisó que “el trazo que conocemos hoy de Lima es tributario de una Lima prehispánica”. Es decir, existen muchas avenidas y calles que han sido trazadas siguiendo los caminos prehispánicos. “Francisco Pizarro no hubiese podido fundar una ciudad en un terreno vació. Aquí había agricultura, canales de regadío, vegetación y, sobre todo, había mano de obra”, indicó.
Luego la ciudad pasó por un largo periodo sin novedad, desde la fundación española hasta 1746, fecha en la que un terremoto destruyó aquella Lima barroca, que también se había convertido en el centro del poder político, militar, religioso e intelectual. A partir de este evento se tuvo que construir otra ciudad siguiendo los mismo trazos de la anterior.
“Se hicieron otro tipo de edificios, menos monumentales y siguiendo los lineamientos del neoclásico, con los estilos de moda en esa época. Esa Lima reconstruida no se modificó de forma sustancial hasta la década de 1870, después de la Independencia, a fin de que la ciudad pudiera expandirse”, explicó Orrego.
Sin embargo, esa ciudad quedó suspendida tras la Guerra del Pacífico. “A Lima, y en general a todo el país, le costó reconstruirse”, expresó el historiador.
Asimismo, fueron los años 20, en el centenario de la independencia, los mejores que atravesó Lima en la época republicana. “El gran impulsor de la Lima moderna fue Augusto Leguía. Se hizo una serie de obras públicas, nuevos parques, barrios, entre otros. Lo que se hizo fue liberarnos un poco el modelo francés y darle a Lima un poco tono más norteamericano, a través de un nuevo asfalto, grandes avenidas, suburbios y barrios obreros", detalló.
Esta Lima funcionó hasta la década de los 50, porque a partir de ahí empieza a germinarse otra ciudad producto de la migración provinciana. Fue una época de gran transición, en la cual Lima crece de forma horizontal. En tanto, desde el nuevo mileno se considera que Lima pasa por una época de consolidación.
“El Centro Histórico es producto de este proceso, junto a otros factores. Perdió su fisionomía. Por ejemplo, el deterioro de algunos edificios o casonas antiguas a raíz del terremoto del 40 fue el pretexto para construir algunos edificios con una falsa idea de modernidad”, explicó.
Orrego señaló que el Centro Histórico de Lima conservó un relativo orden hasta los años 50 y que luego se vio “abandonado” por las familias que ahí vivían, quienes se mudaron a otras ciudades.
Mira en nuestra galería cuánto han cambiado los lugares emblemáticos del Centro Histórico de Lima.