Barranco escanea los centenarios ficus de Av. Pedro de Osma

Uno de los enormes ficus que adornaban la emblemática avenida Pedro de Osma, en Barranco, se vino abajo en marzo de este año y afectó un inmueble. El incidente, que pudo terminar en una tragedia, despertó una necesaria discusión sobre la salud de los árboles más viejos de este y otros distritos.

Los 86 árboles que quedan en pie en esta avenida barranquina fueron plantados hace más de 120 años, tiempo en el que no han recibido los cuidados adecuados. Tampoco se han hecho estudios a profundidad sobre su estado.

Para saber si otros ficus de Pedro de Osma están en riesgo de caer, la Municipalidad de Barranco contrató por S/32 mil a la empresa Ciudad Jardín, cuyos expertos analizan árbol por árbol. El ingeniero agrónomo Hernán Taboada, gerente de Servicios a la Ciudad de esta comuna, explicó que en treinta días estarán listos los resultados.

—Troncos y raíces—
La novedad de estos análisis es que Ciudad Jardín utiliza una tecnología que desde hace seis años se emplea para analizar el arbolado urbano de Montevideo (Uruguay), ciudad conocida por ser una de las más arborizadas de Sudamérica.

Se trata del escáner Tree Radar. Este aparato se pasa sobre las veredas y las pistas para conocer el estado de las raíces. También sirve para conocer el interior de los troncos. Los expertos de la citada empresa, que además integran la Asociación Peruana de Arboricultura y Forestería Urbana (APA), ya escanearon los 86 árboles y en los próximos días analizarán los resultados.

Los estudios contratados incluyen una evaluación externa, para detectar enfermedades, hongos o infecciones que harían que los viejos ficus se estén pudriendo por dentro. Una tercera etapa del estudio comprende una visualización de las copas con dron.

Guillermo Gonzales, de la Asociación Peruana de Ecosistemas Urbanos y Arboricultura, denunció en su momento que la caída del ficus en marzo pasado se debió a que sus raíces se vieron afectadas por las obras viales que la comuna de Barranco ejecutó en la Av. Pedro de Osma.

Taboada indicó que el escaneo de los árboles demuestra, preliminarmente, que las raíces están ahí y que no fueron cortadas o dañadas como se señaló en varias denuncias. “Las raíces no están afectadas porque, si así fuera, el árbol se comenzaría a secar”.

Francisco Narrea, gerente municipal de Barranco, indicó que buscan “conservar el ambiente urbano monumental” de Pedro de Osma. La idea es –explicó– dar los cuidados necesarios a los árboles. En algunos casos, los ejemplares que lo requieran serían anclados. “El estudio nos dirá qué hacer en cada árbol”, dijo Narrea.

Añadió que el retiro de ficus se hará solo si representan un riesgo y no queda otra alternativa.

—Arbolado urbano—
Andrés Vernengo, ingeniero forestal fundador de la Asociación Uruguaya de Arboricultura y parte del equipo que estudia los ficus de Barranco, dijo que en Uruguay el escaneo de árboles se hace desde hace seis años luego de que un árbol cayera y matara a una persona en Montevideo. A la fecha ya se han analizado más de 1.500 ejemplares de la capital uruguaya, especialmente los que tienen más riesgo de caer.

Contó que en Montevideo existe una comisión que se encarga de registrar, estudiar y cuidar los árboles patrimoniales.

En Lima, la Ordenanza para la Conservación y Gestión de Áreas Verdes (1852), aprobada por la Municipalidad de Lima en el 2014, establece los lineamientos para la gestión de las áreas verdes. Esta encarga a los distritos mantener, rehabilitar, vigilar e incrementar el número de árboles.

Sobre la base de esta ordenanza, los distritos están obligados a tener programas de poda, fumigación, limpieza y rehabilitación de las especies, siempre con permiso metropolitano. La citada ordenanza contempla 26 infracciones para las entidades o ciudadanos que no la respeten. Por ejemplo, talar un árbol sin autorización se castiga con cinco UIT (S/20.750).

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