Gladys Pereyra Colchado

Basta un grito, un ruido fuerte, que alguien caiga o que los empujones empiecen a hacerse más fuertes. La desesperación es contagiosa y en multitudes puedes convertirse en pánico colectivo en segundos. Hace dos semanas, en Corea del Sur, 156 personas murieron aplastadas en las celebraciones de Halloween en el barrio de Itaewon, Seúl. Se estima que esa noche había 100.000 personas en las calles, pero no hace falta miles para una estampida humana.

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Hace dos años, en la discoteca Thomas Restobar de Los Olivos, 13 jóvenes murieron al intentar salir desesperados por la angosta puerta de un local que reunía a no más de 120 personas. Sin rutas de evacuación libres no importa si el evento es masivo o casi privado, el riesgo crece por la falta de prevención.

Si los eventos clandestinos o sin supervisión de bomberos o policía suponen un peligro en sí mismos, los organizados minuciosamente no están exentos de los riesgos. En cada concierto masivo de los últimos meses, los bomberos atendieron entre 60 y 70 personas con signos de asfixia por aplastamiento, explica Mario Casaretto, jefe departamental de Lima Centro del cuerpo de Bomberos. Solo en el concierto de Coldplay, en el Estadio Nacional, fueron 75 los que presentaron desvanecimiento, pérdida de aire, entre otros efectos de la asfixia

“Las entidades de primera respuesta como Bomberos y Policía Nacional trabajan con los organizadores para evitar desgracias, pero el espectador no es consciente y reta al riesgo”, dice. Las vallas cerca del escenario es donde hay más desvanecimientos porque, explica, los asistentes se resisten a dejar el lugar incluso cuando empiezan a sentir que la presión del público detrás de ellos les impide moverse y, eventualmente, evacuar.

Un minuto para reconocer el lugar hace la diferencia

El general CBP Luis Antonio Ponce La Jara, comandante general del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Peru, sostiene que un comportamiento que debemos obligarnos a cumplir es detenernos unos segundos a identificar las zonas de salida en el centro comercial, discoteca, cine o estadio y ver si están libres. “No sirve de nada si se trata de una puerta con candado”, explica. Tener este conocimiento puede ayudar a mantener la calma ante un imprevisto. Lo siguiente es ubicarse en un punto cercano a estas rutas y emplearlas apenas empiece un movimiento o señal de humo. No esperar la confusión. “Basta que caiga una persona para que caigan otras. Ahí empieza la asfixia y lesiones como rotura de costillas o daños en cabeza” , dice.

Los riesgos por multitudes se dan en emporios comerciales, centros comerciales, conciertos, marchas y hasta procesiones.
Los riesgos por multitudes se dan en emporios comerciales, centros comerciales, conciertos, marchas y hasta procesiones.
/ Carlos Michilot

Si pese a todas las medidas de prevención adoptadas se produce una situación de riesgo, los especialistas recomiendan buscar algún sitio elevado para colocarse, no intentar ir contra la corriente de la marea humana, buscar alejarse de vallas o paredes y no intentar recoger nada que caiga al piso. “Muchas veces el problema empieza cuando en la evacuación alguien se agacha a recoger el celular, la cartera y eso se convierte en una avalancha”, dice Ponce La Jara. Casaretto añade que no gritar ayuda a ahorrar oxígeno y a no incrementar la desesperación de otros. “El pánico colectivo es lo que produce las pérdidas humanas”, recuerda. En caso de caer, lo recomendable es no intentar pararse y colocarse de costado.

1
Identifica las zonas de seguridad y evacuación

El primer paso es ubicar la señalética que indique en qué dirección salir en caso de terremoto, incendio o emergencia. De no existir, retirarse del lugar y advertir a las autoridades

2
Cumplir con el aforo establecido

Por ley, todos los locales deben contar con un aforo visible. Una señal de que la situación es de riesgo es cuando empiezas a chocar involuntariamente con otros o ya no puedes mover los brazos o tocar tu cara. 

3
Colócate en algún lugar elevado

A menos de que se trate de una emergencia por un incendio, se recomienda buscar subirse a alguna plataforma para evitar la avalancha humana hasta que esta disminuya.

4
No pongas resistencia al fluido de la gente

Aunque la primera reacción sea evitar ser llevado por la muchedumbre, resistirse hace perder energía y dificulta la evacuación en emergencias.

5
El suelo es un aliado ante señales de humo

Los bomberos recomiendan tirarse al piso cuando hay presencia de humo. “Hasta 10 centímetros sobre el suelo hay oxígeno para que puedas evacuar rampando”, dice Casaretto.