En medio del debate sobre la delincuencia en Lima y Callao, seis alcaldes -cuatro de ellos afrontando un estado de emergencia ante la crecida de extorsiones- muestran espacios que han logrado rescatar del abandono y de la informalidad. Esto se suma a iniciativas como la de Prolima que ha logrado la restauración de dos iglesias, dos plazas, así como la pavimentación con piedra de 41 cuadras que realizó Prolima en el Centro Histórico de Lima.