El diario oficial “El Peruano” publicó ayer el decreto supremo que declara en estado de emergencia los distritos de Cercado de Lima y Lince, ante la ola de delincuencia del último mes. Estas jurisdicciones capitalinas se unen a San Juan de Lurigancho (SJL) y San Martín de Porres (SMP), donde la medida está vigente desde el 20 de setiembre. Sin embargo, pese a su crítica situación en temas de inseguridad, cuando se van a cumplir diez meses de gestión, los alcaldes de estas cuatro comunas no registran inversiones para reforzar la labor de patrullaje.
Una revisión en el portal de contrataciones del Estado revela que priorizaron invertir en equipamiento y alquiler de inmuebles.
En el caso de la Municipalidad de Lima, la gestión del alcalde Rafael López Aliaga registra una inversión de más de 2 millones de soles en vestuarios, reposición de autos (proceso heredado) y alimento para la brigada canina. Para esto último se adjudicó por un valor de 1 millón de soles.
Lo que sigue en espera es la mayor promesa de campaña de López Aliaga: las 10 mil motos. Abdul Miranda, gerente de seguridad de Lima, informó que el proceso de alquiler está avanzando.
“Calculamos que para fin de año ya debamos tener un primer lote de motos. No te puedo precisar la cantidad, pero está todo encaminado”, refirió el funcionario, quien además dijo que tienen van a adquirir bicicletas y equipamiento para serenos.
-Flotas vehiculares en emergencia-
En San Juan de Lurigancho, el equipo del alcalde Jesús Maldonado explicó que el retraso en las inversiones en patrullaje responde a “la mejora de los expedientes [de contratación] que se tuvo que realizar”. Según se adelantó, se está en proceso de adquirir 50 camionetas y 110 cámaras para videovigilancia.
En Lince, la alcaldesa Malca Schnaiderman priorizó invertir más de S/1 millón en el alquiler de un inmueble “para la Gerencia de Seguridad Ciudadana”.
El pasado 27 setiembre, un día después de renunciar, el saliente gerente de seguridad de Lince remitió un informe donde recordaba que, a través de 13 documentos, había solicitado declarar en emergencia la flota vehicular de serenazgo.
“Esto ha impactado negativamente en el servicio de seguridad ciudadana brindado, ya no se puede hacer uso de todos los recursos para ejecutar el patrullaje municipal e integrado de manera eficaz”, dice el oficio.
El Comercio trató de comunicarse con el municipio de Lince, pero no tuvo respuesta.
Desde San Martin de Porres, el equipo del alcalde Hernan Sifuentes sostuvo que existen 11 proyectos por un valor aproximado de 4.5 millones de soles y que, en el marco del estado de emergencia, se ha realizado una demanda adicional de mayores recursos ante el Ministerio de Economía para mejorar el sistema de videovigilancia y a la vez el patrullaje dentro del distrito.
“Una vez otorgada la transferencia correspondiente, tenemos una programación aproximada de ejecución de 40 días”, indicaron en respuesta a El Comercio. “Tenemos la prioridad de dotar a la Gerencia de Seguridad ciudadana 8 camionetas y 30 motos, al igual que a la Gerencia de Fiscalización y Transporte, con camiones y grúas; y más personal, debidamente equipados para su labor tanto de seguridad ciudadana como de fiscalización en las calles”, añadieron.
-Cuestión de priorización-
En circunscripciones cercanas, algunas gestiones distritales sí registran inversiones en patrullaje. El alcalde de Magdalena, Francis Allison, por ejemplo, invirtió en la adquisición de 40 unidades (20 camionetas y 20 motocicletas. Según Allison, la planificación y las metas puestas son claves al inicio de la gestión local.
“Si Magdalena y otros distritos han podido comprar, significa que todos lo han podido hacer. Es cuestión de prioridades, porque en nuestro distrito, el 31% del presupuesto del año ha sido invertido en seguridad ciudadana. Los nueve meses de gestión que hemos tenido son plazos mas que suficientes para tener resultados, cubren los plazos para poder comprar unidades para el patrullaje”, afirmó Allison.
En esa misma línea, el alcalde del Callao, Pedro Spadaro, quien adquirió 50 unidades para patrullaje, destacó “la importancia de generar inversión desde los municipios para tener las herramientas necesarias para un trabajo óptimo” en la seguridad.
“El trinomio entre Municipalidad, Policía y Juntas vecinales ya no es un sueño, en el Callao, ahora, es una realidad. Nosotros trabajamos de manera articulada y permanente con el Ministerio del Interior y las juntas vecinales de cada una de las zonas del Callao, para determinar la mejor estrategia para combatir la delincuencia y para que todos tengan conocimiento de la inversión que realizamos en temas de seguridad ciudadana”, refirió el alcalde chalaco.
Tanto Magdalena como Callao ya alistan nuevas inversiones para seguir reforzando la seguridad en su distrito.