El Jirón de la Unión fue escenario de un violento asalto a mano armada por parte de delincuentes que entraron a la Joyería Crispín usando trajes para protegerse del coronavirus pero también, lógicamente, para dificultar su identificación. Esta al ser una de las calles más transitadas, comerciales y turísticas de la ciudad tiene cámaras de vigilancia por todos lados y muchos testigos. Fue un robo avezado.
Los asaltantes se hicieron pasar por clientes. Entraron cuando empezaba a caer la noche, en el horario en que los agentes de seguridad privada de los bancos ya no están alertas y los policías de las Águilas Negras ya no rondan estos establecimientos. Los cuatro sujetos llegaron en dos motos. Dos se encargaron de entrar a la tienda, apuntar a los vendedores, romper cuatro vitrinas y meter todas las joyas posibles en sus maletines. El atraco duró segundos.
Afuera, en pleno jirón, bajo la asustada mirada de los testigos, los otros dos delincuentes esperaban con las motocicletas prendidas. Una vez con el botín, los cuatro huyeron a toda velocidad por el jirón Huancavelica. La policía no llegó a tiempo esta vez, pero inmediatamente se puso a trabajar en un plan para capturarlos.
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Horas más tardes, los agentes encontraron en el Rímac una de las motos utilizadas por estos delincuentes que se habían llevado 30 mil dólares en joyas, aproximadamente. La motocicleta fue hallada en la pista auxiliar de la Vía de Evitamiento, en el sentido norte, a la altura del puente conocido como IPD. La Policía sospechó que los hampones abandonaron la moto y huyeron en un vehículo. Tenían que empezar a atar cabos.
Antes de la captura de los sujetos, la policía ya daba algunas señales de estar muy cerca de los delincuentes. El coronel PNP Roger Pérez, jefe de la División Centro 1, contaba que habían logrado identificar a uno de los asaltantes por sus huellas dactilares. Era cuestión de horas, dijo.
Y así fue. Casi 20 horas después del asalto, la policía encontró a los cuatro sujetos en una vivienda a la altura del paradero denominado Miguel Iglesias, en San Juan de Miraflores. Había sido alquilada hace más de tres meses. Los delincuentes son Jhony Alonso Barahona Aller, Maicoll Jeampierre Paredes Estica, Pedro José Cassana Alcalde y Mario Fermín Alata Quispe. Junto a ellos fue encontrada una mujer identificada como Pierina Rosa Bocangel Polick. Varios de los detenidos registran antecedentes.
En el lugar se encontraron municiones para arma larga y para pistola, estrellas revienta las llantas, y chalecos antibalas. También encontraron las pruebas del delito: los trajes blancos usados por dos de los delincuentes el día del robo, las joyas robadas, así como dos armas de fuego y una granada de guerra. Este robo avezado no es el único cometido en pleno jirón de la Unión. Hay antecedentes de asaltos parecidos, incluso algunos con intercambio de balas.
-Otros asaltos en el jirón de la Unión-
En agosto de 2010, un delincuente asaltó al cambista de moneda extranjera Wilder Sarmiento y le robó 10 mil dólares. La Policía Nacional informó que el cambista fue interceptado por Carlos Casas Lozano y otros dos delincuentes.
El forcejeo entre el cambista y los hampones, en la cuadra diez del Jirón de La Unión, fue observado por un efectivo policial, quien redujo a Casas Lozano realizando algunos disparos al aire. El delincuente tenía en su poder un revólver.
Gracias a la intervención, se logró recuperar un 80 por ciento de la cantidad total robada a Sarmiento y se decomisó la motocicleta de placa MYG-63458 en la que se movilizaban los asaltantes.
Un robo parecido sucedió el 6 de noviembre de 2015, donde un cambista terminó herido tras resistirse al robo de su canguro por parte de dos ‘marcas’. El intento de asalto ocurrió en la cuadra dos de la calle Huancavelica en el Cercado de Lima.
El cambista, conocido en la zona como Ciro, terminó con la cabeza rota y lesiones en la cara tras ser golpeado por los delincuentes. Sin embargo, los gritos de los comerciantes de la zona obligaron a huir a los hampones.
Los ‘marcas’ escaparon en dos motos lineales sin placa y realizaron disparos al aire durante su huida. El cambista fue trasladado a un hospital cercano.
En agosto de 2017, otro asalto en Jirón de la Unión dejó un muerto y cinco heridos. Cuatro delincuentes, usando dos motos lineales, intentaron robar 25 mil dólares a un cambista en el jirón Ocoña. Este iba escoltado con un agente de seguridad, quien reacción y se enfrentó a los asaltantes.
La balacera, que acabó con la vida de la trabajadora de limpieza Rosa Mamani Apaza, se desató cuando intentaron huir a pocas cuadras de la plaza San Martín. Casi 8 meses después, la PNP logró detener a Giancarlo Enrique Chafloque Salazar, sospechoso de haber participado en el crimen.
El cambista Antonio Guzmán Bazán resultó herido el 6 marzo de 2020, tras resistirse a ser asaltado en la cuadra uno del jirón Ocoña en el Cercado de Lima. Uno de los ladrones simuló ser un vendedor ambulante. Tras el forcejeo, el cambista fue baleado. Posteriormente se lo trasladó al Hospital Arzobispo Loayza. Logró ser estabilizado y sobrevivió.
Tres días después, la Policía Nacional capturó al delincuente que disparó este cambista. El criminal se había disfrazado de payaso y fingió ser un vendedor de caramelos para acercarse e intentar asaltarlo.
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