La Policía Nacional del Perú (PNP) aseguró que no utilizó canicas ni perdigones de plomo en las manifestaciones registradas hace unos días contra el entonces Gobierno de Manuel Merino (renunció el domingo a la presidencia de la República).
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No obstante, el domingo, durante la necropsia al cadáver de Jack Pintado Sánchez, uno de los dos jóvenes que murieron durante la segunda marcha nacional, se extrajeron diez perdigones, los mismos que le ocasionaron la muerte, según el certificado de defunción. Ronald Gamarra, abogado de la familia del joven fallecido, subrayó que se trata de perdigones de plomo y conjeturó que quien le disparó estuvo cerca a Jack y le disparó directamente a él.
Asimismo, Alonso Chero, periodista de El Comercio, resultó herido mientras cubría las protestas. Recibió un disparo por la espalda. Luego, mediante cirugía, se le extrajo un proyectil redondo de vidrio (con características similares a una canica).
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En su comunicado de ayer [ver al final de la nota], la Policía Nacional del Perú señaló que "no utiliza canicas ni perdigones de plomo entre sus municiones durante manifestaciones como las producidas los últimos días en la capital, al no estar contemplados en sus protocolos de intervención”, indicó la PNP en un comunicado [ver al final de la nota].
“Los efectivos solo emplearon perdigones de goma no letales, establecidos para este tipo de procedimientos, tanto en la movilización del jueves 12 y del sábado 14 de noviembre”, agregó.
La Policía Nacional indicó que, durante la protesta del 14 de noviembre, su actuación “fue vigilante y de acompañamiento, mientras las manifestaciones se desarrollaron de forma pacífica”. Incluso, aseguró que se pidió el acompañamiento de la Defensoría del Pueblo y el Ministerio Público.
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No obstante, según su versión, a partir de 5 p.m., “cerca de 2.500 manifestantes, que no habían acompañado la marcha desde un inicio”, llegaron a las inmediaciones de las avenidas Nicolás de Piérola y Abancay, premunidos de piedras, artefactos pirotécnicos y material inflamable.
“En la noche, cuando esta multitud de manifestantes se acercaba al Congreso, adoptó actitudes violentas, arrojando artefactos pirotécnicos, piedras, palos y objetos punzantes contra los policías que se encontraban detrás de las rejas antidisturbios”, indicó la policía en su pronunciamiento.
“Ante ello, el personal policial resistió pasivamente por, aproximadamente, una hora y media. Incluso, algunos de los artefactos pirotécnicos lanzados por los manifestantes estallaron en los escudos, cascos y uniformes de los policías, hiriendo a varios de ellos”, se lee en otra parte del comunicado.
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Ante ello, según la PNP, los agentes procedieron a aplicar la “estrategia de contención” y lanzaron gases lacrimógenos, como elemento disuasivo, para “dispersar a los manifestantes que se sumaron a la protesta”.
El acta fiscal de necropsia señala que el cuerpo de Jack Bryan Pintado Sánchez tenía 10 perdigones. Estos le ocasionaron cuatro heridas en la cabeza, dos en el cuello, dos en el tórax y dos en el brazo derecho.