La reciente denuncia de la periodista Pamela Acosta, quien tuvo problemas al momento de viajar por tener un pasaporte “no verificado” en el aeropuerto Jorge Chávez, es solo la punta del iceberg de la oscura situación de los pasaportes electrónicos en el Perú.
Nueva información recopilada por El Comercio revela la existencia de un ‘club’ detrás de los “problemas de verificación” que ahora afecta a miles de personas. Las empresas que gestionan esta etapa del proceso de emisión de pasaportes va licitando más de 100 millones de soles en los últimos 8 años pese a que persisten los problemas para la obtención de estos documentos. Migraciones ahora depende casi por completo de estas compañías. Una de ellas tiene denuncias de corrupción en otros países.
Durante estos 8 años, estas compañías han logrado consolidar su control casi total sobre todo el proceso de la producción de pasaportes electrónicos: ellos proveen desde las libretas físicas hasta los códigos y el software de operación que permiten la inscripción digital de la información del usuario.
El amarre eterno
Esta historia comienza en el 2015 cuando la Superintendencia Nacional de Migraciones contrató al Consorcio In Continu Et Services S.A.S. – Gemalto México S.A. de C.V. para instalar el servicio de emisión de los pasaportes electrónicos. Este proceso requiere de Certificados Digitales (códigos) que permiten la certificación y lectura de la información cargada al documento y el chip que este posee.
Desde entonces, ambas compañías vienen siendo contratadas con millonarias adjudicaciones. Actualmente se presentan como dos empresas diferentes: Thales Dis México (antes Gemalto) e IN Continu Et Services. La primera pertenece al Grupo Thales y la última al conglomerado IN Groupe. Ambos son gigantes económicos de Francia.
La siguiente gráfica interactiva muestra hasta nueve adjudicaciones en favor de IN Continu, emitidas desde el 2018. La imagen revela cómo los montos acordados han crecido con el tiempo.
Además de suministrar los servicios y equipamiento para la emisión de pasaportes a nivel mundial, el Grupo Thales provee a otros sectores. Uno de ellos es el de la tecnología militar. En diversos países se le ha denunciado por irregularidades y actos de corrupción en este sector empresarial, y actualmente están a cargo de casi todo el proceso de emisión de pasaportes en el Perú, donde sacar este documento puede tardar varios meses.
Thales fue investigada por presuntos actos de corrupción en Malasia y Sudáfrica, por casos referentes a la venta a sus fuerzas armadas. En Argentina, habría incumplido un setenta por ciento de sus obligaciones en un contrato para el monitoreo del espacio aéreo. Michel Joserrand, ex presidente de una de las filiales, confesó la existencia de un sistema de corrupción dentro del grupo. En Chile, boicotearon los intentos de contratar con otra empresa para la emisión de pasaportes.
En el portal Infobae se informó sobre las declaraciones de Michel Joserrand, quien confesó la presencia de un sistema corrupto dentro de la empresa Thales.
El diario chileno La Tercera reveló los intentos del consorcio en el que participaba Thales para evitar que se le adjudicaran los contratos a otra empresa.
La agencia Reuters informó sobre el inicio del juicio contra el expresidente de Sudáfrica, quien fue acusado de recibir dinero de Thales para adjudicar contratos.
Los contratos millonarios acordados con Migraciones, que se vienen efectuando bajo la tutela de seis superintendentes, revelan la dependencia de esta entidad con la empresa Thales. Fuentes del mismo sector, que prefieren mantenerse en el anonimato por temor a represalias, confesaron a El Comercio que esta firma ejerce cierta manipulación a la institución, la cual depende de su sistema y sus códigos para la emisión de pasaportes.
Asimismo, El Comercio conversó con la propia exsuperintendente de Migraciones, Roxana del Águila (2018-2021). La exfuncionaria indicó que Thales “estaba mandando propuestas muy altas [...] montos inaccesibles” porque el sistema sería propiedad intelectual de la empresa. Agregó que existía un problema “serio porque se caían los sistemas permanentemente”.
María Elena Sánchez, especialista en contrataciones con el Estado, mencionó a El Comercio que, en este caso existe una grave dificultad, “[hemos] entrado a una situación en la que el proveedor tiene todas las de ganar porque tiene la llave y la información”, mencionó a este Diario.
“La propia entidad, ya sea por inexperiencia o no, ha cometido un error. Han cometido el error [y] se siguen dando servicios [a los usuarios] de manera incorrecta. Lo que tiene que hacer la entidad es buscar competencia. Buscar que el sistema se adecúe [para poder acceder a más proveedores]”, señaló a este Diario Roberto Benavides, árbitro y experto en abastecimiento público y contrataciones del Estado.
De hecho, ya se han vivido momentos de alta tensión, donde la emisión de dichos documentos se vio afectada o en riesgo. Según contratos, cartas y notificaciones de Migraciones y Thales, El Comercio pudo conocer las razones detrás de los pasaportes “sin verificar” emitidos y el riesgo latente de la paralización parcial o total del proceso de elaboración de los documentos que existe día a día.
Primeras fallas en el sistema
No fue hasta febrero del 2021 cuando se mostraron los primeros síntomas de una problemática que continúa poniendo contra las cuerdas a Migraciones. Un comunicado interno entre la institución y Thales notificó de un error en el sistema de impresión de pasaportes.
El 3 de marzo, la Superintendencia informó sobre otro problema adicional con el software y sobre el próximo vencimiento del “certificado Terminal”. De caducar dicho certificado, Migraciones no podría continuar con la emisión de los pasaportes electrónicos.
Thales respondió deslindando del problema y explicó que la entidad no tenía un contrato con X-Infotech, empresa que suministraba la renovación del certificado Terminal. Dicha disyuntiva se repitió entre el 22 y 23 de marzo del 2021, hasta que en junio se firmó un nuevo contrato con Thales, vía contratación directa, para el servicio de soporte técnico por casi cinco millones de soles.
Acusación hacia Migraciones
Entre agosto y setiembre, la situación entre ambas partes escaló inmensamente. Tras mencionar fallas en dos de los certificados necesarios para la emisión de los pasaportes, Thales indicó que “Migraciones realizó cambios en el sistema y ajustes manuales”.
Esto habría derivado, según la empresa, a una vulneración en el sistema de emisión de pasaportes. Así, desde julio hasta noviembre del 2021, la emisión de pasaportes se vio en riesgo. Cartas enviadas por Thales a Migraciones indican que la entidad no respondía a sus comunicados, aun cuando se había planteado una propuesta económica para resolver las fallas.
El 30 de noviembre del mismo año, con Martha Cecilia Silvestre Casas a cargo, Thales envió una carta advirtiendo tanto a Migraciones como al entonces ministro del Interior, Avelino Guillén, que “desde el 26 de diciembre no se podrá emitir pasaportes” por no contar con los certificados ni con una salida contractual. Thales continuó culpando a Migraciones de las fallas.
Emisión de pasaportes “en producción”
El 17 de octubre del 2022, casi un año después, por medio de una Carta Notarial, Thales indicó que “a partir del 01 de noviembre del 2022, se dejará de atender requerimientos técnicos administrativos […] siendo responsabilidad de la entidad [Migraciones] tanto el mantenimiento del sistema como de la renovación de los certificados PKI”.
Una semana luego, Migraciones solicitó, nuevamente, la renovación del certificado Terminal para el 28 de octubre. Nuevamente, Thales mostró su indisposición. Al no contar con los códigos de verificación, los pasaportes emitidos durante esta época registraron el estatus de “en producción”, dado que no se pudo concretar todo el proceso de validación.
El 3 de noviembre, Migraciones suscribió una contratación internacional por S/ 53.942 con la empresa X-Infotech, la cual es parte del Grupo Thales y proveedor de la empresa de dicho certificado. De tal forma, se contrató el “servicio de activación de la interfaz KMS para la renovación del certificado Terminal”. Esto ocurrió durante la gestión de Jorge Armando Fernández Campos.
Entre el 29 de octubre y el 8 de noviembre, Migraciones se vio obligada a emitir y entregar los documentos en estado de “producción”. A inicios de este año, bajo la administración de Armando García Chunga, se le adjudicó a Thales un nuevo contrato por S/ 58,932.095.00 para el servicio y mantenimiento del sistema de emisión.
Contraloría advirtió sobre problemas contractuales
El Comercio conversó en exclusiva con Smith Flores Vásquez, subgerente de control del Sector Seguridad Interna y Externa de la Contraloría General de la República, quien resaltó que su institución ya había alertado a Migraciones en diversas ocasiones por las formas como se adjudicaban los contratos.
En dicha reunión, se confirmó a El Comercio que las diligencias realizadas por la Contraloría revelan que se habrían emitido hasta 17 mil pasaportes que no completaron los procesos de verificación, debido a que Migraciones no logró actualizar sus certificados de manera oportuna.
Asimismo, en un Informe de Hito de Control presentado en febrero de este año, se identificaron dos “situaciones adversas” en la contratación directa adjudicada a IN Continu, valorizada en más de 12 millones de soles para la adquisición de 546.015 libretas de pasaporte y láminas de seguridad. Esto durante la actual gestión de Armando García Chunga.
Según Migraciones, todos los usuarios pueden conocer el estado de su pasaporte ingresando al siguiente enlace: https://sel.migraciones.gob.pe/servmig-valreg/VerificarPAS
El documento establece que “Migraciones no consideró la participación técnica de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) a pesar de que no contaba con personal técnico especializado [para establecer los criterios mínimos]; así como, dichas especificaciones técnicas presentan diferencias en relación con las elaboradas por OACI en el año 2022″.
Asimismo, se arguye que en las bases del contrato no se “establecen requisitos a considerar por el contratista para elegir los laboratorios [...] para la realización de pruebas [...] que determinen el cumplimiento de las especificaciones técnicas [...] generando el riesgo de [...] que la entidad proceda a [...] disponer el uso de libretas de pasaporte [que] presenten inconformidades”.
Descargos
El exsuperintendente de Migraciones, Boris Gonzalo Potozén Braco rechazó “categóricamente cualquier hecho vinculado con actos de corrupción que pretenda involucrarme y que se hubiera dado durante mi gestión como Superintendente Nacional de Migraciones”.
Asimismo, resaltó que “la implementación del nuevo pasaporte electrónico peruano, se dio cuando el Estado peruano [...] venía desplegando un proceso de negociación internacional con la Unión Europea para obtener la exoneración de la visa Schengen”.
“Así, se contrató, luego de una licitación internacional que contó con la asistencia técnica del organismo mundial competente sobre pasaportes, la Organización de Aviación Civil Internacional [...] donde participaron cerca de 12 empresas líderes de manera individual o consorciadas, adjudicándose de manera trasparente y sin reclamos por 102 millones de soles al consorcio francés In Continue et Services/Gemalto, empresas líderes mundiales en sus rubros”, agregó Potozén.
Finalmente, resaltó que su “gestión estuvo enfocada en el servicio al ciudadano y mal habríamos hecho concertado dolosamente con empresas y defraudando las expectativas de millones de personas”.
Por su parte, Migraciones comunicó que desde julio del 2022, la entidad “no cuenta con el servicio de soporte y mantenimiento, con el consiguiente riesgo para la continuidad del servicio”. Asimismo, se indicó que la empresa Thales no cuenta con antecedentes ni sanciones en el Tribunal de Contrataciones del Estado.
Respecto a la confianza hacia la empresa, la institución respondió que “se han considerado una serie de penalidades por atrasos y por incumplimientos contractuales”. Migraciones también reveló que el “sistema de emisión de pasaportes electrónicos, tiene una antigüedad mayor a 6 años”, razón por la cual el último contrato incluye la renovación de la infraestructura tecnológica.
Sobre la dependencia hacia esta empresa, la entidad indicó que, en caso se escogiera a un nuevo proveedor, se requeriría realizar un cambio total del sistema de emisión de pasaportes. En tal sentido, “Migraciones viene realizando actividades para una nueva infraestructura tecnológica del sistema con un costo estimado de S/ 313′784.234″, pero demoraría hasta cinco años.
El Comercio se contactó con los representantes en Perú de Thales para recoger los descargos de la empresa, pero no se tuvo respuesta hasta el cierre de esta edición. A inicios de junio, presentaron la siguiente información respecto a sus servicios y contratos con Migraciones.