El Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) informó que ayer venció el plazo de 10 días hábiles para que las empresas operadoras cesen la contratación del servicio de telefonía móvil en la vía pública.
En un recorrido por el Mercado Central, en el Cercado de Lima, se observó que aún persisten grupos de vendedores ambulantes, con chalecos de las empresas Bitel y Entel, que ofrecen chips prepago a S/5. “Solo necesitamos tu DNI y ya puedes tener el chip”, aseguran.
►Osiptel prohíbe venta de telefonía en la vía pública
Luis Pacheco, gerente de Supervisión y Fiscalización del Osiptel, precisó que las empresas que incumplan esta medida pueden ser sancionadas con multas que van desde 151 hasta 350 UIT la más grave.
“De acuerdo con las Condiciones de Uso, la contratación de los servicios públicos móviles debe realizarse en puntos de venta habilitados y ubicados en una dirección específica. Estos procesos son de absoluta responsabilidad de la empresa”, señaló Pacheco.
El funcionario agregó que ya están coordinando para realizar intervenciones inopinadas a nivel nacional para detener este ilegal comercio.
En un comunicado, Entel indicó que han participado a todos sus distribuidores la orden de Osiptel para que “se dejen sin efecto” las ventas en la calle. Al cierre de esta edición, la empresa Bitel no contestó las interrogantes de este Diario.
–Riesgos para clientes–
Pacheco explicó que la venta ambulatoria genera vulnerabilidad de datos personales de los clientes. Además recalcó que bajo este sistema, las empresas de telefonía no pueden garantizar que los abonados reciban la información completa del servicio que contratan.
“No sabemos si los datos otorgados van a servir para activen un servicio a nombre de los clientes y se cometan acciones irregulares. Una línea activada en la calle puede estar involucrada en un caso delictivo”, precisó Pacheco.
A mediados de este año, Osiptel realizó más de 100 acciones de supervisión a nivel nacional en las cuales advirtió que la mayoría de vendedores ambulantes de chips de las empresas operadoras habrían brindado información no veraz o incompleta a los solicitantes de líneas móviles.
Asimismo, en otros casos no se realizaba la verificación biométrica de la huella dactilar para la identificación del contratante. Adicionalmente se observó que, en algunos casos, se comercializaban líneas pre activadas bajo la titularidad de terceras personas.