Pico, placa y puerto, por Angus Laurie

Esta semana, la Municipalidad Metropolitana de Lima ha extendido la restricción vehicular a través de ‘pico y placa’ hacia los camiones. En una primera etapa, la medida limitaría la circulación de camiones en la carretera Panamericana Sur. Su segunda etapa incluye la expansión de la iniciativa hacia una parte de la Panamericana Norte, y parte de la Vía de Evitamiento.

Según El Comercio, en paralelo al ‘pico y placa’ para camiones, la Municipalidad de Lima empezará a restringir la circulación de camiones según su tonelaje en las vías. Por ejemplo,a partir del 4 de noviembre, los vehículos N3 –los camiones más pesados– tendrán que circular exclusivamente por las vías arteriales, dentro de una franja horaria de 10 a.m. a 5 p.m. y de 9 p.m. a 6:30 a.m.

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Desde mucho tiempo he sido un crítico de ‘pico y placa’. Sin embargo, la iniciativa de ordenar la circulación de camiones en base a su tonelaje, tipos de vías y horarios es un buen cambio. Los vehículos pesados –aunque son vitales para el funcionamiento de la ciudad– generan muchos conflictos con los otros usuarios de la vía pública. No conozco las estadísticas de Lima, pero en Londres, en el 2012, vehículos pesados fueron involucrados en dos tercios de las muertes de ciclistas.

En este sentido, la propuesta para ordenar la circulación de los camiones y mitigar sus impactos negativos no solamente puede tener un beneficio positivo para el tráfico en la hora punta, sino que se puede empezar a generar una mejor ciudad, bajando la inseguridad para las personas que montan bicicleta o caminan.

Por otro lado, la propuesta resalta la problemática de tener una ciudad gestionada por dos gobiernos –la Municipalidad Metropolitana de Lima y la Provincia Constitucional de Callao–. Una propuesta que busca ordenar y restringir la circulación de los camiones debe incluir al Callao. De hecho, tal propuesta debe empezar con el Callao.

Los camiones son importantes para Lima, pero son vitales para el Callao –donde se ubica el aeropuerto más importante a escala nacional y uno de los puertos más importantes del Pacífico de América del Sur. Ambos centros de logística juegan un rol vital en la economía nacional.

Fue hace menos de un mes que la ministra de Transportes, María Jara, anunció la modernización y ampliación de la infraestructura del puerto del Callao, y mencionó la importancia de promover el anillo vial periférico y un mejoramiento en la conexión ferroviaria para facilitar el acceso hacia la nueva infraestructura.

Mientras no exista esta nueva infraestructura, el puerto del Callao sigue siendo completamente dependiente de las vías arteriales de Lima.