Piura: reconstruyen espalda de niño de 11 años con piel de cerdo, colágeno de vaca y cartílago de tiburón

Especialistas del hospital José Cayetano Heredia, de la Red Asistencial Piura de EsSalud, salvaron y mejoraron la calidad de vida de un niño de 11 años que sufrió quemaduras de tercer grado en su espalda producto de una mala manipulación del alcohol y fuego.

El menor llegó al hospital de Sullana de EsSalud, donde recibió los primeros auxilios, pero -debido a la gravedad de las lesiones en su piel- fue trasladado al hospital José Cayetano Heredia.

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El cirujano plástico Nerio Becerra Otiniano, quien lideró esta importante cirugía, explicó que el niño recibió un tratamiento avanzado que consta de dos etapas. La primera fue la preparación de la úlcera (herida) de la quemadura con posterior colocación de una matriz dérmica acelular (Integra) procedente de colágeno bovino y cartílago de aleta de tiburón.

Explicó que la segunda etapa consistió en la reconstrucción del defecto utilizando sus propios tejidos y piel de cerdo.

“El xenoinjerto porcino o piel de cerdo es un tejido heterólogo que se asemeja a la piel humana y nos sirve como un apósito (elemento para cubrir la herida) temporal, favorece las condiciones locales de la parte dañada del cuerpo, disminuyendo los mediadores inflamatorios, aumentando el tejido de granulación y favoreciendo la epitelización”, señaló el especialista.

Añadió que la matriz dérmica acelular o Integra está hecha de silicona, colágeno vacuno y cartílago de tiburón que se coloca sobre la úlcera y crea el entorno necesario para la regeneración de la piel y el tejido nuevo, aportando neodermis y reduciendo así la tasa de retracciones cutáneas posteriores.

El especialista de EsSalud manifestó que, apenas culminó el procedimiento, el niño fue dado de alta. Sin embargo, pocos días después retornó al hospital para continuar con la segunda etapa reconstructiva.

Atención Integral

Tras varios de días de espera, el correspondiente seguimiento médico y atención en diferentes ramas de salud, el menor piurano fue dado de alta, sin embargo, continuará el proceso de recuperación progresiva en su casa, en Sullana.

El menor de edad recibe atención psicológica por profesionales de EsSalud Piura debido al shock traumático que le dejó el terrible accidente.

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