Una ampolla de Cutenox de 40 miligramos cuesta S/ 7 en el sector público, mientras que la clínica San Pablo cobra S/ 326 por el mismo producto. Si el seguro termina pagando gran parte de este sobrecosto, ¿por qué no hace nada al respecto?
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Según un reportaje de Cuarto Poder, la respuesta es la “integración vertical”, un modelo que permite que las clínicas privadas y las aseguradoras pertenezcan a un mismo grupo empresarial. En pocas palabras, no hay pierde.
Una situación usual en el sistema de salud privado es encontrarse con seguros que cubren el 90% del costo total, por ejemplo, de la mencionada Cutenox. Es decir, usted pagaría 10%: S/ 32.6, en la clínica San Pablo. Sin embargo, este monto sigue siendo más de cuatro veces superior al que ofrece el sector público.
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“[La integración vertical] requiere de regulación, en otros países, por ejemplo, en Colombia se permite integración vertical hasta el 20% del total de prestaciones. Aquí en el Perú puede ser de 100%, el total del negocio, y por lo tanto no hay ningún control ni mecanismos de supervisión”, señaló durante el informe periodístico Mario Ríos, presidente de Justicia en Salud.
Para el presidente de la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec), Crisólogo Cáceres, la respuesta está en una ley antimonopolios.
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“El Perú, después de un largo debate de siete años sacó su ley antimonopolios, pero aduciendo la emergencia del COVID-19 se ha pospuesto su entrada en vigencia hasta marzo de 2021”, apuntó.
El reportaje también menciona el método de la clínica adventista Good Hope, que utiliza la lista Kairos para definir los precios de los medicamentos que vende.
Según Cáceres, esta lista Kairos “es un precio que se han inventado las clínicas para justificar lo que hacen. Para determinar los precios ellos se inventan su propia escala que está fuera de la realidad, totalmente ajena al mercado que tanto se defiende, y sobre esta escala hacen imaginarios descuentos para justificar un atropello”.
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Por ejemplo, en diciembre de 2018, la lista Kairos de la clínica Good Hope detallaba un precio de S/ 389 por dos unidades de Rocephin, cuya versión genérica es conocida como ceftriaxona. Fuera de la clínica, esta medicina cuesta S/ 6 la unidad.
Incluso con los descuentos de la misma clínica y del seguro, de S/ 179 y S/ 155, respectivamente, el precio final por ambas unidades fue de S/ 54, bastante mayor que los S/ 12 que pagaría el usuario fuera de la clínica Good Hope.
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