(Video: El Comercio)
Redacción EC

Al menos 4 mil personas pudieron disfrutar de la , un platillo preparado por hermanos franciscanos que tiene más de 800 años de historia alimentando a miles de personas necesitadas.

Su origen se remonta a un pueblo de Italia que lleva este nombre en el San Francisco de Asís instituyó dicho potaje como una manera de compartir y en especial de alcanzar el perdón por el Día de la indulgencia de los pecados.

Esta tradición comenzó en el año 1212 y se extendió hasta Latinoamérica. Como es costumbre en nuestra ciudad, hoy se realizó esta sopa en la parroquia Nuestra Señora de los Ángeles, del Rímac.

Se necesitó unos 40 voluntarios para preparar la sopa y se recibió más de 500 kilos de carne, menudencias, yuca, zapallos, entre otros ingredientes en donaciones.

Este alimento está destinado a las personas con escasos recursos. Hasta hace unos años atrás, la preparación de la porciúncula estuvo en riesgo por la falta de donaciones. Sin embargo, el bueno corazón hace que continúe esta tradición.

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