Tragedia en la Costa Verde: crónica de un entrenamiento mortal

La playa Marbella, en Magdalena del Mar, fue escenario de un entrenamiento militar en el que cuatro jóvenes soldados perdieron la vida.

Alrededor de las 6 a.m. de ayer, una tropa del Batallón de Intendencia 511 del cuartel Simón Bolívar (Pueblo Libre) realizaba ejercicios en la Costa Verde. Luego, este grupo de 45 militares inició una carrera hacia la playa y se detuvo a orillas del mar que, en este sector, no es apto para los bañistas debido a la peligrosidad de la corriente.

Pasadas las 7 a.m., las olas arrastraron a un grupo del batallón que realizaba calistenia en la zona rocosa. Roberto Pinedo, un pescador que se encontraba a unos metros del lugar, contó que vio a unas 15 personas dentro del mar. “Algunos pudieron nadar hacia la orilla, pero otros quedaron atrapados por el oleaje, que es muy bravo en la mañana”, dijo. El resto del batallón estaba en la zona de rocas tratando de auxiliar a sus compañeros.

Alrededor de las 7:30 a.m. agentes de la Unidad de Rescate de la policía llegaron a la playa para auxiliar a los militares que aún se encontraban en el agua. Rescataron a tres personas, incluido el mayor Alexis Klifford Rey Sánchez, oficial al mando del entrenamiento que, según el Ejército, no contaba con autorización. Pese a la labor de los socorristas, se ahogaron en Marbella el sargento Bryan Lizana Chávez, de 19 años; el cabo Percy Gálvez Pareja, de 21; y los soldados Miguel Ángel León Lamas, de 20, y Edinson Huangal Alvarado, de 18.

El ministro de Defensa, Jorge Nieto, sostuvo en un inicio que los militares se habrían detenido en ese sector de la playa para tomarse fotografías.

La policía manejaba la hipótesis de que los jóvenes ingresaron al mar como parte de un ritual para demostrar valentía conocido como ‘saludo al mar’. “Cuando se ha hecho este ingreso al agua, no se ha tomado en cuenta la peligrosidad de las olas de este sector. No se ha respetado la bandera roja ni los carteles de advertencia”, indicó un socorrista.

Por la noche, el ministro Nieto volvió a dirigirse a la prensa para explicar lo ocurrido, y mostró un video de los hechos en RPP. En las imágenes se observa que los soldados ingresan al mar en tres grupos, sujetados de los brazos. De pronto, una ola los arrastra. Solo algunos logran salir. Otros intentan regresar al agua para salvar a sus compañeros con sogas y llantas.

“Ellos debían haber estado haciendo otra actividad. Debían entrenar para un desfile militar, pero se tomó esa decisión. El mar estaba muy bravo. Estamos muy dolidos”, dijo Nieto.

—Denuncian negligencia—
Según las familias, las víctimas no sabían nadar. Además, señalaron que cuando los jóvenes fueron arrastrados por el mar, llevaban puestos botas y pantalón. Tatiana Huangal, hermana de Edinson Huangal, dijo que él había pasado un año realizando labores en el servicio funerario del Ejército y recién hace un mes se incorporó al cuartel de Pueblo Libre.

“Existe una negligencia de los oficiales porque ellos sabían que él no había recibido entrenamiento físico”, contó en la puerta de la morgue central de Lima.

Carmen Lamas, prima de Miguel Ángel León, informó que, además de no saber nadar, el joven habría sufrido una lesión en la pierna hace más de un mes: “Hace dos semanas nos dijo que le habían quitado el yeso. Él no podía meterse al mar”.

Las familias también cuestionaron la versión de que los jóvenes se detuvieron en la playa para tomarse un ‘selfie’. Pablo Valdivia, familiar de Percy Gálvez, señaló que en el cuartel les habían prohibido usar teléfonos móviles. “Los castigaban si tenían esos equipos. Por eso yo tengo guardado su celular. Nos están tomando el pelo”, denunció Valdivia.