Zorros en La Molina: ¿Por qué los vecinos empezaron a investigar la causa de la desaparición de sus mascotas?

Entre el acumulado del registro visual, los vecinos de Rinconada Alta encontraron la lamentable respuesta ante la desaparición de sus mascotas. En horas de la noche, mientras el vecindario dormía, zorros andinos deambulaban por las calles.

Estos animales, omnívoros por naturaleza y con hasta catorce kilos de peso, fueron vistos arrastrando a los felinos desaparecidos, cargándolos entre sus mandíbulas. Una vecina del lugar contó a Latina Noticias que pudo evidenciar que un zorro “se lleva a [su] gata arrastrándola por toda la calle”.

Ante América Noticias, otra residente reveló que encontraron los restos de su gato tras ser atacado por uno de los zorros andinos que se han hecho espacio en esta zona de La Molina. “Me da demasiada ansiedad olvidarme de cerrar algo [de la casa] y que el gato salga a pasear y que el zorro se lo lleve”, declaró la afectada.

Según indicó Mendivil, ella habría alertado sobre esta situación al Servicio Nacional Forestal de Fauna Silvestre (Serfor). Sin embargo, no recibió el apoyo que esperaba, pues la entidad solo les recomendó tener precauciones debido a que los zorros habrían cambiado de hábitat.

“Serfor nos dijo que esto es su nuevo hábitat, que probablemente se movilizaron y que nosotros debemos tener todas las precauciones del caso”, mencionó Mendivil a las cámaras de América Noticias.

A través de un comunicado, el Serfor lamentó la pérdida de mascotas de vecinos de La Molina. Adicionalmente, se informó que la presencia de los zorros andinos en este lugar “se debe a que forma parte de su hábitat natural”, debido a que se ubica en área intermedia, entre rural y urbana.

Adicionalmente, se indicó que “con el fin de mantener a buen recaudo a las mascotas, y por la tranquilidad de los vecinos, recomendamos mantener a los animales dentro de las casas, o sacarlos con correa bajo la vigilancia de sus dueños”.

Enrique Michaud, director de la Zona Silvestre de Serfor, aclaró a América Noticias que es poco probable que uno de estos zorros ataque a un humano debido a que “suelen ser espantados por la presencia de personas”.

“Nunca he visto un ataque de un zorro a un ser humano. No tiene la fuerza suficiente para atacar a un perro grande, pero a un gato probablemente sí”, advirtió el experto. Agregó que estos animales tienen una dieta variada, por lo que pueden consumir roedores, aves, otros animales, e incluso frutas.

“El mensaje que tenemos es de la coexistencia pacífica y de tratar de mantener la armonía [con los zorros] como sucede en otras partes del mundo. Buscamos promover que se respete el hábitat de la especie, pero que también se dé una convivencia armónica que no perjudique a los vecinos”, declaró Michaud a América.

Por su parte, el Dr. Paolo Amaya, biólogo y docente de la Universidad César Vallejo (UCV), aclaró que la salida de zorros de “su hábitat a un escenario más urbano nos puede hacer pensar que su necesidad de sobrevivencia ante la falta de alimento ha sido muy grande, sobre todo si consideramos que los zorros son animales nocturnos y solitarios”.

La Municipalidad de La Molina comunicó que se ha coordinado con Serfor para “realizar acciones conjuntas, a fin de establecer los lugares estratégicos que permitirían disuadir la presencia de esta especie y tomar otras medidas para salvaguardar la tranquilidad de los vecinos”.

A esto, se sumarán labores por parte de seguridad ciudadana para ahuyentar a los zorros, realizando patrullajes continuos. Adicionalmente, se orientará a la población para que dispongan sus residuos sólidos en el horario adecuado para evitar atraer a los zorros a la zona.

Amaya también aconsejó reportar de manera inmediata a las instituciones especializadas el avistamiento de estos animales, así como mantener una distancia prudencial y responsable de las especies silvestres. Ante cualquier registro de un animal silvestre, puede contactar con el WhatsApp “Alerta Serfor” al 947588269.