A unos 900 metros de la Gran Terminal Terrestre de Plaza Norte, buses de empresas de transporte interprovincial embarcan y desembarcan pasajeros en plena vía pública y sin ningún tipo de control de fiscalización. La impunidad y la inseguridad siguen presente en el sector de Fiori, pese a que la terminal que operaba ahí fue cerrada hace cuatro años.
Basta caminar por la avenida Tomás Valle, frente al centro comercial Plaza Norte, en San Martín de Porres (SMP), para que un grupo de sujetos se acerquen a preguntar a qué ciudad del norte del país quieres viajar. “Los buses llegan cada hora hasta acá [en la avenida Prolongación Fiori], pero si quieres puedes tomarlo en 40 minutos saliendo de la terminal”, explica uno de ellos identificado como Dante. Para “mayor seguridad” te ofrece su teléfono para que lo ubiques fácilmente.
Estos grupos han desarrollado un circuito informal frente al terminal Plaza Norte para embarcar pasajeros en buses de empresas formales a un menor costo: entre S/25 a S/35.
Durante el seguimiento que realizó El Comercio se comprobó que en la avenida Prolongación Fiori, los pasajeros suben a las unidades de las empresas Cruz del Norte y Valtursa sin identificarse o presentar el carnet de vacunación contra el COVID-19. Este Diario busco sin éxito comunicarse con ambas empresas.
“Fiori no desapareció, solo el espacio físico. Esta situación es muy peligrosa para los pasajeros que compran sus pasajes en el terminal y que pasan por controles de seguridad. Estas empresas pueden estar subiendo artefactos inflamables sin darse cuenta. Por otro lado, es un escenario que se puede prestar para el tráfico de drogas, armas y hasta personas”, señaló el extitular de la Dirección de Transporte Terrestre del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), Lino de la Barrera.
Alfonso Florez, gerente general de la fundación Transitemos explicó que, si bien existen algunas empresas cuentan con autorización para recoger pasajeros en ruta, en dichos puntos debe estar presente personal de la Sutran (Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas Carga y Mercancías) que fiscalice que cumplen con las condiciones adecuadas para el embarque de pasajeros.
“Si una empresa tiene autorización para recoger pasajeros en ruta debe haber fiscalización de la Sutran en dicho punto, de lo contrario estamos hablando de una empresa formal que realiza una actividad informal. La entidad puede realizar el seguimiento por GPS de los buses e identificar si las unidades se detienen demasiado tiempo en un punto inadecuado, pero no usan la tecnología”, explicó.
La Sutran aseguró que este año se han intervenido 36 buses interprovinciales en Fiori por embarcar o desembarcar a usuarios en áreas no establecidas. “A ellos se les inició un procedimiento sancionador con la suspensión de ruta por 90 días”, informaron. Sin embargo, no precisaron si las empresas Cruz del Norte y Valtursa han sido amonestados previamente.
“Es una respuesta fuera de lugar. Se están exponiendo a las personas al peligro. La sanción no es proporcional con la falta”, criticó De la Barrera.
Descontrol
En la zona de Fiori no solo prevalece la informalidad, los vecinos de este sector han denunciado constantemente que sufren de inseguridad por los asaltos y la prostitución que prolifera. La semana pasada, un sujeto arrojó un explosivo contra la terminal Marco Polo, propiedad de la empresa de transportes Flores Hermanos, que buscaba reiniciar operaciones este mes.
“En esta zona hay mafias que no quieren que entre en funcionamiento un terminal formal. Muchas de las empresas formales han recibido amedrentamientos. Ellos quieren seguir operando en estacionamientos sin que las autoridades municipales haga nada”, denunció Martín Ojeda, representante de la Asociación de Empresas de Transporte Interprovincial.
“Lo que evidencia esta situación es que hay un divorcio entre el MTC y la Sutran. Parecería que al ministerio no le interesa el transporte más allá de la infraestructura; mientras que, la segunda solo hace campañas de seguridad cuando hay temporada alta. No hay coordinación con la municipalidad ni con la Policía Nacional”, dijo De la Barrera.
Ayer, la municipalidad de SMP clausuró nuevamente el terminal Marco Polo. El Comercio intentó en reiteradas ocasiones contactar con la municipalidad de San Martín de Porres, pero hasta el cierre de la edición no obtuvo respuesta.