ADRIANA GARAVITO
Si fuese por él, este espacio quedaría en blanco. Máximo colocaría algunas imágenes de sus nuevas pinturas, pero nada de información y mucho menos citas suyas.
Y es que a Alberto Grieve no solo no le gustan las entrevistas, sino que cree fielmente que cada uno ve lo que quiere ver frente a una pintura y por eso no necesita dar explicaciones. “Lo que yo contaría sería la historia detrás de cada pintura, pero para eso necesitaría mucho tiempo, así que mejor no digo nada”.
“Con el dibujo es distinto, porque existe una narrativa”, agrega. “Yo pinto de frente, no hago un boceto de ninguna de mis pinturas. Todo va de frente a la brocha o al pincel y listo. Pinto. Eso es lo que más me gusta: que no se trate de entender algo en específico”.
Grieve lleva esta característica al extremo: hasta su página web carece de información (solo está armada con fotos de su trabajo). Y, por supuesto, lo disfruta.
“Me gusta ser un pintor de bajo perfil”, comenta. “Así solo saben de mí los que realmente deberían saber de mí. ¿Para qué necesito más?”.
UNA CARRERA DE COLOR
Sin embargo, no hay que ser un crítico especializado para notar uno de los elementos más importantes de su trabajo abstracto: el color.
“En verdad no me había percatado de qué tan colorista soy. Siento que es algo que se ha estado diciendo desde hace poco, pero el color es parte de mi trabajo desde que empecé”, confiesa. “Y tiene que ver mucho con este país, que está lleno de intensidades, no como en otros lados, que están acostumbrados a ambientes más oscuros y, claro, uno no se inventa tonalidades”.
Él vivió en Europa mucho tiempo. De hecho, cuando era joven, dejó Lima para estudiar Economía en Londres. Una vez allá, decidió cambiar su ruta y llevar cursos de pintura. “Por qué cambié de opinión es algo que solo comparto con personas más cercanas. Pero, bueno, decidí hacer el cambio pese a que sabía que estaba dejando una carrera segura por una que no te asegura nada”.
Y así, tras vender libros, ser mozo, pintar paredes, repartir periódicos y hasta llamarse mecánico, Alberto encontró un espacio para él como artista.
El tiempo ha pasado y, últimamente, cada vez que hace una muestra se dice a sí mismo que será la última vez.
Pero aquí está y hoy se inaugura su muestra “Obras recientes” en la galería Fórum. “Veamos qué sucede de aquí a dos años”, finaliza.
MÁS INFORMACIÓN
Lugar: Galería Fórum.
Dirección: Av. Larco 1150, Miraflores.
Día y hora: Hoy. 8 p.m.
Entrada: Libre.