“¡Mi país, mi país!”, dice el meme donde Homero Simpson, blanquirroja en mano, festeja el rol que cumple Perú en “” (“Rise of the Beasts”), última entrega de la taquillera saga. Un meme que bien puede representar a todos los peruanos. La generosa e histórica taquilla garantiza que millones de ojos verán nuestras maravillas arqueológicas y naturales en la pantalla. Aun así, una pregunta prevalece: ¿Es esta una buena película?

“Transformers: el despertar de las bestias”
La trama

Los autobots liderados por Optimus Prime (Peter Cullen) buscan una llave que puede llevarlos de regreso a su planeta, Cybertron. Cuando el mismo objeto es codiciado por los terrorcons para beneficiar a su líder, Unicron, los seres mecánicos necesitan confiar en las habilidades de humanos como Elena Wallace (Dominique Fishback) y Noah Díaz (Anthony Ramos) para asegurar su sobrevivencia y también la de la Tierra.

La trama

El rol de Perú

Cusco, Perú, es el lugar donde los autobots buscan la otra mitad de la llave necesaria para regresar a Cybertron. Se lucen Machu Picchu, la Plaza de Armas, la Bajada de Santa Ana y el Coricancha. Asimismo, la selva de Tarapoto cumple un rol. Vecinos de Cusco fueron contratados como extras para recrear una festividad.

El clímax de la cinta ocurre también en el país, donde autobots, maximals y terrorcons se agarran a golpes. Dos terceras partes de la cinta se ambientan en Perú, tiempo extenso, comparable al rol que jugó Brasil en “Rápidos y Furiosos 5control” (”Fast 5″). Que encima de todo esta filmación ocurriese entre septiembre y octubre del 2021, en medio de las restricciones sanitarias por la pandemia del Covid-19, y a pesar de los escasos incentivos para filmaciones extranjeras en el país, habla del . No recuerdo alguna otra película extranjera que mostrase al Perú con tanto respeto, sin exotismos ni confusiones con culturas mesoamericanas que nada tienen que ver con este rincón del mundo. Por ese lado, no hay quejas.

Arcee y Wheeljack en una escena de acción de "Transformers: el despertar de las bestias".
Arcee y Wheeljack en una escena de acción de "Transformers: el despertar de las bestias".
/ Courtesy of Paramount Pictures.

El núcleo dramático

Como en cada película de Transformers hasta el momento, son los robots quienes protagonizan junto a los humanos; son el motivo por el que la gente va a las salas. En cierto modo, su importancia hace ver a los humanos como secundarios. En otras películas de la saga la acción ejecutada por los autobots es excusa para saltarse la lógica narrativa, con resultados no convincentes, mientras que otros aspectos también son descuidados, como la existencia de personajes carentes de empatía con el espectador, otro pecado en el audiovisual.

“El despertar de las bestias” se preocupa por construir personajes protagónicos sin que ello implique sacrificar secuencias de acción. Por un lado está la relación de Optimus Prime con sus autobots, de los cuales hace el rol de protector más que de líder; de hermano antes que general. Al otro extremo están los humanos, donde destaca el personaje de Noah Díaz.

Anthony Ramos ofrece una performance correcta como el héroe que actúa, pero sin llegar a ser un cabeza dura; es el corazón de la historia. No se puede decir lo mismo de la Elena de Dominique Fishback, cuyo rol es solo llevar la historia de un lugar a otro. Pero humanos, autobots y maximals salen ganando si se les compara a los terrorcons, villanos unidimensionales, malos sin encanto, acartonados. Su única función es poner trabas a los buenos. No destacan ni siquiera por el trabajo vocal de Peter Dinklage como el oxidado Scourge.

El origen del conflicto
Sobre la próxima película

Tras esta película, la saga “Transformers” volverá al cine con una película sobre el origen de los conflictos entre autobots y sus eternos enemigos, los decepticons. Ambientada en el planeta Cybetron, contará con las voces de Chris Hemsworth (Optimus), Scarlett Johansson (Elita), Laurence Fisgburne (Alpha Trion), Brian Tyree Henry (Megatron); etc.

Anthony Ramos y Dominique Fishback, actores protagónicos de "Transformers: El despertar de las bestias".
Anthony Ramos y Dominique Fishback, actores protagónicos de "Transformers: El despertar de las bestias".
/ Photo Credit: Jonathan Wenk

Mejor conflicto, aunque de breve, es el que surge entre los mismos héroes. Hay algo especial en ver a Optimus Prime, con la voz de un compungido Peter Cullen, ponerse en una posición de humildad. Esa es la secuencia mejor actuada de la cinta.

En resumen, “Transformers: el despertar de la bestias” es una buena película. Fallida como tantos blockbusters, pero que ofrece algo más que solo acción, sea para el fan de la franquicia, para el que desea redención para una saga con tantos traspiés creativos, el espectador nuevo o el peruano que necesita ver a su gente y cultura en la pantalla grande. Tiene el corazón en el lugar correcto y no pierde foco. Por último, incluye una referencia que ciertos nostálgicos y entusiastas han pedido por años.

CALIFICACIÓN

3 ESTRELLAS DE 5