RODRIGO BEDOYA FORNO
¿Qué puede unir a tres señores de más de 70 años? Su pasión por el fútbol. Y también su barrio, en donde crecieron y forjaron una linda amistad, creando unos lazos que, para decirlo claro, duran más allá de la muerte.
De eso trata “Viejos amigos”, ópera prima de Fernando Villarán y que llegará a los cines en agosto
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Un cuento de Roberto Fontanarrosa, sobre unos hombres que secuestran a un amigo para llevarlo al estadio, ya que es la cábala del equipo del que son hinchas, fue el primer chispazo de la historia. “Días después, veo cómo pasaba una caravana fúnebre. Y al final de la misma veo un grupo de ancianos con pelo blanco matándose de risa. Y pensé que esos debían ser los amigos del fallecido”, recuerda Villarán. “Y, cuando hago el mix de esa anécdota con el cuento de Fontanarrosa, se me ocurre la idea de tres viejos que roban las cenizas de su amigo fallecido para irse a ver un partido de fútbol”, añade.
Con esa base, el cineasta decidió que el equipo sea el Sport Boys; y el barrio, el Callao. “Mucho de los personajes responden a mi abuelo materno, Luis Luján”, dice Villarán. “Era un tipo muy criollo, el típico criollo que se ha ido perdiendo. Y él era del Boys, así que es un homenaje a él. A eso súmale que yo quería que la película fuera un viaje, una travesía, y el único espacio donde podía funcionar eso era en el Callao. Y me gustaba la coyuntura del Boys: creo que los verdaderos hinchas son los de los equipos que sufren, a los que no les va bien. Hay un tema romántico del hinchaje que quería rescatar”, añade.
LOS ACTORES CORRECTOS
Para encarnar a estos tres viejos que van al estadio con las cenizas de su amigo, y que después pasean por el Callao viviendo mil aventuras, Villarán sabía que tenía un registro de actores limitados. Pensó en Carlos Gassols, a quien conocía. Después, conoció a Enrique Victoria. Y, al último, pensó en Ricardo Blume, quien, tras leer el guion, le dio el sí con el compromiso de coordinar fechas. La cinta obtuvo el premio de producción de largometrajes del Ministerio de Cultura en el 2011, y fue así que el proyecto obtuvo el empujón necesario para su grabación, que se hizo en el verano del 2013.
Varias son las influencias que Villarán reconoce le han servido para el filme. “El tipo de comedia de los hermanos Coen me ha marcado: comedia negra, absurda en algunos momentos, que está en función de la comedia y no tanto de la historia, al estilo ‘The Big Lebowski’”, explica el cineasta. “Y también descubrí a Mario Monicelli, como su notable ‘Amigos míos’, y pensé que ese tipo de comedia funcionaba; me marcó mucho para trabajar. Y también ‘Maridos’, de John Cassavetes, con la figura de la muerte del amigo, y la pregunta de cómo volver a casa y rehacer la vida. Es un drama, pero la historia me marcó”.
Con la película ya terminada, la fecha de estreno del filme es agosto de este año. New Century Films, la empresa que ha distribuido películas como “¡Asu mare!” y “A los 40”, se encargará de la distribución del filme. “Creo que la historia es una comedia tierna, que responde a un hecho: todos tenemos viejos amigos. Así sea hombre o mujer, viejo o joven: todos tenemos amigos y cosas que contar al respecto”, concluye Villarán.