Yiddá Eslava y Julián Zucchi ya no están juntos, aunque –según refieren- el cariño, el respeto y la admiración mutuos, perduran. Luego de once años, le pusieron fin a una relación que inspiró un ‘stand-up comedy’ y una saga cinematográfica, cuya tercera y última entrega, “¿Ahora somos 3? Sí, mi amor”, llegará a las salas de cine el próximo 25 de enero del 2024.
“Fue una decisión difícil (la separación) que se tomó en conjunto. Quizás uno propuso y el otro meditó, pero, finalmente, fue tomada por ambos. La relación se agotó”, señala Yiddá. “Tenemos personalidades muy fuertes, somos un poco tercos y chocamos”, añade el artista argentino.
Aunque saludable, la separación no deja de ser dolorosa para la popular pareja que mantiene esa chispa que los unió. “Se viene ‘¿Nos divorciamos: Sí, mi amor’”, bromea la actriz.
“Con todo el dolor de nuestra alma, no habrá más ‘Sí, mi amor’. Le tenemos cariño a la marca, pero a veces hay que saber ponerle punto final a un proyecto para no ensuciarlo. De hecho, nuestra productora (Wallaz Producciones) seguirá existiendo, así como las oficinas y los estudios, que los seguimos compartiendo, pero yo tengo ideas que quiero realizar de forma independiente, y ella tiene otras. Por el bien de nuestros hijos evitamos tener discusiones laborales innecesarias. Ellos siempre serán nuestra prioridad”, destaca Zucchi.
“No creo que encuentre en este mundo a una persona en la que pueda confiar -en el sentido laboral- tanto como en Julián. Como tengo limitaciones en el tema de producir, de realizar, lo primero que siempre hago es consultarle”, asiente Eslava. “Vamos a ser familia por el resto de nuestros días y nuestros hijos siempre van a ser nuestra prioridad”, advierte el artista argentino.
“¿Ahora somos 3? Sí, mi amor” está inspirada en la paternidad y también en quienes esquivan a esta.
“Esta última película tiene mucho de realidad, en cuanto a las complicaciones de mi primer embarazo. Pensé que tenía preeclampsia, y lo que tuve fueron contracciones por hacer un ejercicio indebido. Retenía líquidos. Subí mucho de peso. Llegó un momento en que solo utilizaba medias porque no me entraba el zapato. A ese nivel llegué”, recuerda la artista nacional. “Y el anillo de compromiso que le había regalado, no le salía del dedo”, interrumpe el ex Parchís.
“¿Ahora somos 3? Sí, mi amor”, la culminación de un viaje de risas y emociones, que en el 2020 tuvo su primera entrega, y dos años después, su segunda, trae de regreso a la pantalla grande a Nancy Cavagnari en un rol divertido y sarcástico. La actriz interpreta a Caridad, la madre de Bea.
“Tiene una energía envidiable. Es un ser iluminado, muy divertida, desborda criollada. Interpreta a una chalaca (Caridad, madre ausente de Bea) que tiene barrio, pero como vivió mucho tiempo en Estados Unidos, cuando habla utiliza algunas palabras en inglés. Es rubia, bronceada”, destaca Yiddá,
Nueva etapa
Tras la separación, la expareja retomó algunas actividades que tenían pendientes. Julián priorizó en su trabajo y en el problema de salud que tiene en la piel. Yiddá enfocó sus energías en perder peso con ejercicios y una alimentación saludable.
“Mi sistema inmune ataca a mi piel producto del estrés. Tuve que ver muchos doctores. Ahora estoy mejor que nunca. Me volqué a la medicina natural. Estoy sanando. Creo que el problema no era el estrés sino mi exmujer (ríe)”, bromea el actor.
“Yo bajé 8 kilos, dejé el azúcar y camino diariamente como 12 kilómetros. Que quede claro que lo hice por mí, y no por la separación, como mucha gente comenta. He sido atleta toda la vida, solo retomé algo que me encanta”, destaca Eslava.
¿Cuál es la decisión más difícil que me tocó tomar en la vida? “Creo que no hay solo una. Un cúmulo de decisiones me han llevado hasta donde estoy en este momento. Lo primero fue dejar un trabajo seguro para dedicarme al arte. Otra decisión difícil e importante fue formar una familia, al igual que separarnos”, asegura tras aclarar que la persona con quien fue captada bailando, hace algunas semanas, es solo un amigo cercano.
“Es un amigo que me dio un beso en la frente. ¡Qué excitante! (ríe). Bailamos, me gusta la salsa. Luego nos despedimos. Y eso fue todo”, aclara Yiddá.
“Ese día yo me quedé cuidando a los chicos porque unos días antes me había ido a Argentina. Le tocaba salir a ella. Y de la grabación me enteré por ella. Lo tomamos con humor. Mis amigos de Argentina me llamaron para bromearme con ese tema. Fue gracioso”, rememora.
Finalmente, los artistas aclaran que seguirán vinculados laboralmente porque tienen contratos pendientes que contrajeron antes de la separación.
“Tenemos contratos desde enero con algunas marcas y auspiciadores, que no debemos pasar por alto. Por el hecho de estar separados no podemos eludir responsabilidades”, asiente Julián.
“Es una situación difícil, pues seguimos juntos con muchas cosas, solo que no chapamos (ríe). Y no descarto que cuando tengamos 75 años, y ya no queden rastros de colágeno, volvamos a estar juntos”, comenta Eslava. “No fue algo que buscamos, pero sabemos que es lo mejor. Y eso no quita que uno pueda seguir queriendo y respetando a esa persona”, subraya Zucchi.