Damo Susuki: Conversamos con el extraño zen de pelo largo

Erró por el Sahara, vivió en pueblos remotos, en casas okupas. En 1970 habitaba un cine abandonado de Múnich cuando se puso a aullar al sol y lo llamaron para ser el primer cantante de Can, banda insignia del krautrock. Admirado por colectivos que van de Joy Division a Sonic Youth, de Cabaret Voltaire a Radiohead, no tardaría en maravillar a David Byrne y ser consagrado por el sumo sacerdote David Bowie.

Al japonés Damo Suzuki (67) –su verdadero nombre es Kenji– se lo acusa también de inventar el pospunk, el ambient y The Stone Roses. Pero lo que más le gusta en la vida es viajar. No se detiene ni cuando van a condecorarlo, obstinado piloto de esa nave incombustible que es él mismo.

— ¿Tu destino es estar en la carretera?
No tengo destino y por eso despierto feliz cada mañana. No configuro la estación final como un objetivo. Tampoco me gusta tener respuestas, la creatividad no las necesita. Apenas veo que se acerca una respuesta, la rompo y comienzo desde el principio.

— ¿Ese sería un concepto aplicable a tu música, el nomadismo?
Si lees nómada al revés sale mi nombre, así que lo más probable es que tengas razón. Pero cualquier tipo de “ismo” no es lo mío, los ismos determina una dirección categorizada. El nomadismo no tiene solución, es como el desinterés por obtener una respuesta. Te sientes tan libre que nada te fuerza al hacer y al deber, que son los mandatos del odioso sistema.

— ¿Hay algo rescatable allí?
Mi madre. Ella es la persona más influyente en mi vida. Y crear tiempo y espacio para trabajar con los portadores de sonido locales. Esta es mi misión y no tengo que escuchar ninguna otra música. La música es comunicación y creo que estoy haciendo lo mejor que puedo.

—Zapar y zarpar—
Soul, funk, reggae, electrónica, étnica, minimalismo, tango o vals: todo le sirve. Así opera desde 1997 la Damo Suzuki Network, red musical planetaria basada en la composición instantánea, anárquica y conceptual. Por supuesto, desconfía de las multinacionales y prefiere tocar en vivo. Él las llama “oportunidades sonoras”. Apenas supo que en el Perú alternará con Juan Luis Pereyra (El Polen), Manongo Mujica (Perujazz), Tavo Castillo (Frágil) y Daniel López (Actitud Modulada), les pidió que por favor ni siquiera ensayen.

— ¿Por qué es mejor improvisar que grabar discos?
Porque no me gusta el sistema, pero lamentablemente la música está allí: componer, ensayar, lanzar discos, promocionarlos. La palabra "improvisar" no es para mi música, lo mío es “composición instantánea”. Aunque tampoco, lo que hago es “I.N.G” [juego fonético para referirse a ‘energy’]. Repítela 20 veces y sonará como “energía”. Creo energía positiva junto a los portadores de sonido locales y la comparto con el público. Esto es transferencia metafísica.

— Sin embargo, has grabado por lo menos 38 discos. ¿No es una contradicción?
No sé la cantidad exacta, pero seguro que son más de 38. Como sabes, mi performance es diferente cada vez porque el portador de sonido local cambia constantemente. A veces los proveedores de servicios de sonido desean liberar el rendimiento en la red y me preguntan si pueden lanzarlo, yo no tengo ningún problema con eso. De esta manera hay versiones locales limitadas, de 300 o 3 mil copias. Es como una fruta exótica que puedes conseguir en una tienda muy especial. Como te dije, no trabajo en la industria porque puedo vivir en otro mundo. La música es comunicación, me gusta vivir mientras esté en este planeta, la vida es la solución más hermosa y positiva. Naturalmente, soy una persona muy simple, pero, ¿quién tiene interés en liberar una pieza con 77 minutos de longitud?

— ¿Qué sientes cuando te llaman inventor de pospunk, ambient y The Stone Roses?
Nunca pienso en eso, solo hago lo que es más fácil para mí. Suficiente con ser Damo Suzuki.

— ¿Y cuando escuchas “I’m Damo Suzuki" [canción de The Fall dedicada a él]?
Respeto a Mark E. Smith. Hizo mi nombre muy popular. Lanzaron esa canción y los fui a ver, después del show hablamos hasta el amanecer. Perturbé sus sueños. Luego estuvimos en el Festival de Lyon. Mark E. siempre ha sido amable conmigo. Desde mediados de los 80 está cantando este tema, en realidad él es Damo Suzuki.

—Parte de la religión—
“¿Dónde estaré, en qué tierra, bajo qué cielo, a esta misma hora dentro de un año? ¿Seguiré aún entre los vivos ese día?”, se pregunta el hombre que aullaba bajo el sol de Múnich. “Uso la voz como un instrumento”, dice el compatriota de Ryuichi Sakamoto, The 5.6.7.8’s, Luna Sea y Yoko Ono. Alisa la legendaria barba de monje shaolin y dice: “No canto sobre algo concreto, improviso la melodía y la textura. A veces suena como inglés, francés o alemán, pero realmente es el lenguaje de la Edad de Piedra”. Es setiembre de 1973, Suzuki renuncia al aullido y se casa con una testigo de Jehová. Entonces sobrevivirá a una operación sin transfusión de sangre.

— ¿Qué concepto te merecen espacio y tiempo, espíritu y materia, autoconciencia y conciencia objetiva, individuo y mundo?
¿Concepto? Solo soy Damo Suzuki y mi estilo de vida funciona como tal, sin influencias de nadie, no pertenezco a ninguna parte y todo lo creativo que soy encaja con mi estilo de vida. Eso significa que me estoy dedicando de manera individual, no creo estar trabajando o haciendo una solución de flúor en mi vida. Todo viene con flujo natural. Por lo tanto, no tengo agente exclusivo, no me pongo en contacto con etiquetas exclusivas, sé cómo controlar mi tiempo. Solo me gusta estar libre de tantas soluciones como sea posible, tener más mi propio tiempo. Lo que pasó ya no me importa. Lo principal es la libertad que Dios nos dio para elegir.

— Fuiste testigo de Jehová. ¿Qué otra ortodoxia tienes o has tenido?
No he estado involucrado en los Testigos de Jehová por mucho tiempo. Todavía tengo interés en contactar con la biblia todos los días. Muchas religiones siguen cosas extrañas, tienen figuras y ahogamientos para adorar, incluso aunque solo sean un trozo de madera o papel. Y ese es el poder de otra cosa que no tiene nada que ver con adorar a Dios. Dios no vive en una casa parecida a una iglesia. Pero si quieres ver lo que te rodea solo mira tu mano, por ejemplo, allí hay muchas funciones y sistemas matemáticos. ¿Crees que todo puede pasar con el big bang? ¿Crees que el big bang es portador de un sistema tan complicado?

— ¿Y qué imagen tienes del Perú?
Una que siempre se conecta con los incas. Que tuvieron un presidente japonés. 'Peruan food' [sic] es una moda secreta en la Europa que habito [Colonia, Alemania]. Mucha gente en Chile y Argentina me habló de vuestra cocina. Ser chef también es mi hobby. Probé comida chilena, no es muy auténtica. Ahora estoy feliz de probar el sabor original.

— Te llamas Kenji, como el hijo de Fujimori. ¿Tienes alguna opinión sobre Kenya, el súbdito japonés?
¿Lo reconoces como tu compatriota? [risas]. La política no me interesa. ¿Cómo es posible que alguien establezca reglas cuando nunca ha sido obrero o de baja posición social? No me gusta ningún sistema para un país. Prefiero el antiguo sistema griego de ciudades-Estado. Si uno es talentoso y tiene su moral invicta, jamás se convertiría en político. Debajo del cielo todos son iguales, pero los políticos quieren tener poder sobre la gente y establecerse como élite.

— ¿Has escuchado música peruana?
La primera vez que escuché música peruana fue la flauta de pan de los incas, que a veces se inserta bajo la piel. No recuerdo al artista, pero es el folclor que más me gusta junto a la música clásica.

— ¿Qué deberíamos esperar de tu concierto en Lima?
Estoy feliz de tocar por primera vez. También con los portadores del sonido peruano. Pero no tienes que esperar nada, solo ven y escucha nuestro momento creativo. Lo mejor que me puedo llevar de Lima serán vuestras sonrisas.

— ¿Cómo te gustaría morir?
En secreto. Y que luego arrojen mis cenizas al Océano Índico. Hay mucho polvo nuclear en el Pacífico.

MÁS INFORMACIÓN
​Día y hora: miércoles 20, 9 p.m.
Lugar: Centro de la Amistad Peruano China.
Dirección: cruce de la Av. de la Peruanidad con Jr. Los Mogaburos, Jesús María.
Entradas: Joinnus.com