El proyecto que la convirtió en solista empezó a los 16 años bajo el nombre de Julieta Azul, pero sus más lejanos recuerdos evocan las largas horas que pasaba junto a su padre cantando rock argentino. Hija de los destacados artistas plásticos Eduardo Tokeshi y Luz Letts, Elisa subió por primera vez a los escenarios durante un ‘talent show’ escolar. Desde entonces no ha dejado de cantar. Dueña de una sensibilidad musical que se ha ido fortaleciendo en los últimos siete años, la joven cantautora reconoce a las españolas Russian Red y Christina Rosenvinge como las influencias más notorias de sus inicios. Con el transcurso del tiempo, sin embargo, su evolución vocal y como letrista es notoria. Para confirmarlo, basta escuchar vía SoundCloud “Julieta III”, la canción con la que se estrenó como compositora. Es precisamente a través de esta plataforma y de las redes sociales que Elisa Tokeshi ha dado a conocer más de una docena de temas inspirados en sus propias experiencias, temores, inseguridades y anhelos. En honor a todo este camino recorrido el próximo lanzamiento de su primer álbum compilará nueve temas. Un concierto en junio es otra de las novedades que permitirá conocer una propuesta que oscila entre el indie folk e indie pop, como la propia intérprete señala.
—Sé que tocas varios instrumentos, ¿con cuál compones?
Toco piano, que fue el primer instrumento que aprendí y es el que mejor entiendo, pero curiosamente compongo con guitarra, aunque a veces no sé las armonías que estoy tocando en ese momento (ríe).
—Las letras de tus canciones hablan mucho sobre la fragilidad emocional…
Me interesa mucho el tema de la salud mental, sobre todo desde que a los 18 años me diagnosticaron borderline. Esto se refleja en mis canciones. La música es también como una terapia. Me ha ayudado a darme cuenta de que de las cosas tristes puede salir algo mejor, que puede transformarse también en cosas lindas.
"Me interesa mucho el tema de la salud mental, sobre todo desde que a los 18 años me diagnosticaron borderline"
—¿En qué canciones evidencias este interés?
Una de ellas es “Ajena”, que habla sobre la autolesión, o “Canción agridulce” que aborda el tema de las relaciones tóxicas que a veces ocurren por el trastorno. Ambas están en plataformas, pero con un proyecto que se llama “Pequeño Infinito”, del 2016. Todas mis canciones son muy personales, no me gusta cantar cosas que no he vivido yo misma.
—Acabas de lanzar un videoclip que tiene el nombre de una canción de The Beatles, “Wild Honey Pie”. ¿Está incluido en tu primer álbum?
El videoclip es de un tema que tengo en mi primer EP, “Artificial”, del 2015. Y sí, es el nombre de un tema de The Beatles que no es tan armonioso. Lo que pasa es que ellos tienen una canción que se llama “Honey Pie” que es linda y otra que se llama “Wild Honey Pie” que es como que medio extraña, no es muy agradable. Y mi canción habla un poco de cómo me sentía en ese momento: estaba muy insegura, sentía que no valía la pena, no me sentía querida, por eso le puse el nombre de la hermana fea de “Honey Pie”, porque yo me sentía así.
Pintar la música
—Tu primer álbum ya está en proceso. ¿Cuándo se lanza?
Estoy trabajando un disco compuesto por nueve temas y lo voy a lanzar con suerte este año. Es una recopilación de canciones que he estado tocando y le ha gustado a la gente que me escucha. “Jueves” es el primer single del álbum que ya puede escucharse y este 24 de mayo sacamos un segundo tema.
—Quizás es muy pronto, pero has pensado en hacer alguna colaboración?
Sí, tengo varias en mente. La primera y más próxima será con Fabiana Brenner, una amiga cercana. Además, el 23 de junio me presento en La Noche de Barranco en un concierto que será solo de mujeres. Van a estar Gala Brie, Fernanda Perochena y otras chicas.
—Estudiaste un par de años música, pero luego cambiaste de carrera, ¿Qué pasó?
Aunque ahorita me estoy dedicando de lleno a la música, también estudio pintura. En música estuve dos años, pero luego me pasé a pintura en la Católica. La verdad es que no conecté mucho con la primera carrera, creo que no fue el momento correcto.
—¿Música y pintura confluyen en tu carrera como solista?
De hecho las últimas canciones que compuse para mi LP las hice para un trabajo plástico que acompañé con una canción. Para mí están íntimamente ligadas. Ahora no podría elegir entre ambos, espero no tener que hacerlo. Además, he dibujado y pintado las portadas de mis EP y singles. Tengo pensado hacer lo mismo con los que vienen y con la carátula de mi primer álbum.
—Eres muy activa en redes, como dictan los nuevos tiempos.
Me parece que es una muy buena ventana para comunicar lo que quiero decir con mi música, pero sé que también es bastante tóxico.
El primer videoclip de Elisa Tokeshi ya se encuentra en YouTube y en plataformas como Spotify, Apple Music y Sound Cloud.
Este 23 de junio será parte de un concierto solo de mujeres en La Noche de Barranco. Además, Elisa forma parte de la Comunidad All Star de Converse, espacio creado para apoyar a jóvenes artistas emergentes.