Llegó de España, donde graba actualmente una serie para Netflix. Antes estuvo en México grabando “LaLola” para VIX+, y en Chile, la película “Perra vida”. En el mercado español también formó parte del “El internado: las cumbres” (Prime Video) y de la tercera temporada de “HIT”, serie de RTVE. Francisca Aronsson tiene 17 años y ya ha pasado la mitad de su vida de set en set de grabaciones. A tres meses de cumplir la mayoría de edad (12 de junio), la artista nos habla de su más que prometedora carrera internacional, del casting que hizo para una taquillera película de Marvel y de cómo experimenta la transición de la adolescencia a la vida adulta.
“Tengo sentimientos encontrados con el tema de los 18 años. Quiero cumplirlos porque me abrirá puertas a nivel laboral. Hay muchos personajes y castings a los que no pude acceder por temas de la edad. La serie Élite es uno de ellos. Pero, al mismo tiempo, no quiero llegar a esa edad porque siendo menor me ahorro problemas (ríe). Una vez por confusión usé la tarjeta de mi hermano en el metro. Se dieron cuenta, pero por mi edad no me pusieron multa. Lo pasaron por alto. Además, la protección al menor es fuerte. De alguna manera, me siento más protegida”, asiente Aronsson Grande.
En 2020 pasó su primer gran casting internacional para una serie en Amazon Prime. Desde entonces, la actriz viaja cada dos o tres meses a diferentes lugares del mundo, tentando nuevas oportunidades, conociendo distintas culturas y pensamientos. Aunque, alejarse de sus seres queridos para cumplir sus metas profesionales no ha sido fácil, asegura.
“Agradezco todo lo que me está pasando. Lo estoy disfrutando, pero debo reconocer que se extraña a la familia. Muchas veces me he sentido sola. ¿Si he tenido pareja sentimental? Nunca. Por el ritmo de vida que llevo se me complica establecer una conexión de ese tipo con alguien. También es difícil encontrar una persona de mi edad que tenga la madurez de entender mi trabajo, los viajes y los besos de las escenas. No tengo novio, pero tampoco estoy buscando”, refiere.
La actriz nominada a los Kid’s Choice Awards México 2021 y embajadora de Unicef nació en Suecia. Vivió sus primeros años en España y en la selva de Bolivia. Llegó al Perú cuando tenía siete años. A esa edad tuvo su primer encuentro con el teatro infantil. Un año después apareció por primera vez en la televisión peruana en una secuencia de niños del programa “Gisela Valcárcel, El gran show”.
Francisca está grabando actualmente una serie española para Netflix. Sobre esta adelantó que se trata de un proyecto grande y exitoso que tiene varias temporadas. “No puedo decir cuál es porque es confidencial. Ser parte de este proyecto me ilusiona porque soy fan. Estoy feliz”, asegura.
─En “Perra vida” interpretaste a una adolescente chilena. Fuiste la única extranjera en la película. ¿Por qué crees que no buscaron a una actriz de Chile para el papel?
Esa pregunta me la hice yo varias veces. No me explicaba por qué me eligieron siendo peruana, no viviendo en Chile ni teniendo el acento. Tuve que prepararme, Fue un reto gigante. El año pasado cuando fui a México para grabar “LaLola”, le pregunté a Joshua Mintz, uno de los productores de esa serie, por qué me eligieron. Me dijo que tenía mucho talento, que no había nadie como yo. Obviamente, esos comentarios me dieron seguridad.
─¿“LaLola” fue la primera producción que grabaste en México?
Así es. Pero, anteriormente, me llegó otra propuesta de trabajo, también para VIX+. Era para “Travesuras de la niña mala”, la serie basada en la novela de Mario Vargas Llosa. No pude aceptarla porque estaba grabando la serie “HIT” y era imposible acomodar fechas. Me dio mucha pena porque tenía ilusión de participar en una serie relacionada a Vargas Llosa, porque lo conozco desde los ocho meses. Mis papás estuvieron en reuniones donde se encontraba él y gente del gobierno de España. Tengo fotos. Luego, lo entrevisté en la Feria del Libro, cuando tenía once años. Me lo encontré en distintas etapas de mi vida, me dio pena que no se concretara en esa oportunidad.
─¿Cómo fue tu relación con Bárbara de Regil, en “LaLola”, una actriz de quien se dice es “grosera y prepotente”?
(Ríe) La amo. Me quedé en su casa varias veces, hemos hecho pijamada, dormimos juntas. Es maravillosa. Fue como una madre para mí. Me protegió, me cuidó, me enseñó mucho. Fue un placer trabajar con ella. La pasé muy bien, tuvimos charlas profundas. La adoró.
─“LaLola”, al mismo tiempo que te entretiene también te hace reflexionar, porque habla del machismo y la misoginia, temas que afectan mundialmente. ¿Cómo afrontas esos temas?
Lamentablemente, hemos comenzado a normalizar esos comportamientos. Pensamos que son parte de la vida y que están bien. Nos pasó cuando grabamos, hubo comportamientos machistas. Como estaba normalizada no se daban cuenta. Luego se disculpaban con la directora y los actores. Lo viví desde muy pequeña, pero como mi mamá trabaja en temas de salud sexual y reproductiva, y tiene una ONG que ayuda a mujeres migrantes pobres, siempre tuve la mente abierta. Mis padres siempre me enseñaron que todos somos iguales y tenemos los mismos derechos y oportunidades.
─¿Cuando empezaste a actuar, te imaginaste la dimensión que tendría tu carrera?
Cuando empecé, a los 8 años, en “Amor de madre”, “Al fondo hay sitio” o “Margarita”, no pensé que pasaría todo esto. Cada paso me ha ido sorprendiendo y enamorando. Si no me hubiese lanzado a explorar otras industrias ni a invertir, sin saber lo que pasaría, probablemente no hubiese habido todo este crecimiento personal y profesional. No fue fácil, tuve que tocar muchas puertas. Te voy a contar algo que nunca he contado. Cuando fui a Chile a doblar unas voces de la película “Margarita”, aproveché para visitar algunas agencias de representación de artistas. Tenía nueve años. Aquel día, que no olvido, la señora que nos atendió fue súper maleducada, ni nos miró. Nos gritó. Fue muy incómodo.
─¿Alguna vez pensaste en declinar a tus sueños?
Cuando estuve un año sin conseguir proyectos, pensé muchas cosas sobre mi futuro. Pensaba que era una fracasada. Fue durante la pandemia. Estaba en Suecia. Me sentía fuera del mundo. Había hecho más de 7 películas y un montón de series, pero en ese momento nada funcionaba. Mi representante me decía que tenía talento y potencial, que no tire la toalla. Fue un momento complicado.
─¿Cuál fue el casting más exigente que has hecho?
Fue uno de Marvel. Cuando mi representante me dijo que le escribieron de las oficinas de la directora de casting de Marvel, Sarah Finn, me emocioné. Era la primera vez que aspiraba a un rol para Hollywood. Era todo en inglés. No me dijeron el nombre del personaje, solo sabía que era para la segunda parte de una película. Después de mandar mi casting, le enviaron un correo a mi representante, diciéndole que, por favor, reserve cuatro o seis meses, que era el tiempo de rodaje de la película. Yo ya me veía grabando con Benedict Cumberbatch y todos los actores en Hong Kong. Quedé entre las finalistas, pero no conseguí el papel. Era para la película “Doctor Strange en el Multiverso de la Locura” (2022). Estaba postulando al personaje América Chávez. El casting fue mundial. Me dijeron que me iban a tener en cuenta para una próxima oportunidad.
─¿Al final quién quedó?
La actriz Xochitl Gómez. Tiene los rasgos del cómic. La conocí, es una estupenda actriz.
─¿Hollywood es una de tus principales metas?
Es un mercado al que quiero llegar. Tengo una agencia que me representa. Se llama DePaz Management, pero hasta el momento no tengo los permisos para trabajar. Eso toma tiempo.
─¿Qué artistas tienes como referentes o con quién te gustaría compartir una escena?
Con Natalie Portman, ella me encanta. Y decreto que lo voy a hacer. A la edad que sea, pero lo haré. También me gustaría trabajar con Martin Scorsese. Es uno de los productores a los que más admiro.
─¿Cómo es crecer en el ojo público y lidiar con el acoso sobre tu físico y trabajo artístico en las redes sociales, en las que tienes más de un millón de seguidores?
De hecho, no es fácil. Es una gran responsabilidad saber que más de un millón y medio de personas han decidido seguirme. Desde niñas pequeñas hasta mujeres de 60 años. Como embajadora de Unicef debo cuidar mucho lo que publico. En las redes sociales hay comentarios desatinados, fuera de lugar, ofensivos sobre mi cuerpo, mi cara, mi trabajo. Dicen que cambié, que me sometí a cirugías. Un día estaba tranquila, comiendo una sandía en Colombia, con 14 años, y me llega una noticia, de que en TV nacional han dicho que me hice una rinoplastia, aumento de labios perfilamiento de rostro y liposucción. ¿Cuándo me hice todo eso?
¿Cómo te ves dentro de cinco años?
En esta carrera hay altibajos, pero me veo muy exitosa, de todas maneras.