Ángel Navarro

Parte del encanto que rodea a es el mismo que tiene Chayanne, pero añadiendo a la fórmula otros tres cantantes que logran embelesar a sus miles de seguidores con sus trajes hechos a medida, cortes de actores de telenovela y voces formadas en la música clásica que, al fusionarse, generan una sensación de majestuosidad en el escenario.

Y no es para menos, su mismo nombre, que proviene del latín divus en referencia a lo divino, hace honor a una reputación de grandeza que construyeron durante 20 años, donde sus canciones y covers llegaron a cautivar a su público. “Dejamos de lado cualquier presentación o proyecto en solitario para hacer este homenaje al estilo clásico que nos caracteriza: el de cuatro voces siendo una sola”, comenta David Miller en una entrevista con El Comercio.

¿Qué se necesita para integrar este cuarteto? En primer lugar, tener una gran presencia en el escenario como cantante. Segundo, ser un músico entrenado de forma clásica, con excepción de Izambard. Y finalmente, tener una gran resistencia mental y física para aguantar los continuos viajes y las altas exigencias que son norma en Il Divo. “Aquí puedes viajar de repente a 50 o 70 países por año, presentando un show de calidad en diferentes países, estando lejos de la familia y amigos. Ser un cantante de Il Divo es algo que te consumirá, pero que vale la pena el sacrificio”, menciona Urs Bühler.

Un gran cambio

Tras la muerte de Carlos Marín (1968-2021), el camino que tomó la agrupación fue diferente al que estaban acostumbrados. “Cuando integramos a Steven LaBrie pasamos por una etapa de temor. Su llegada abrió las puertas a cosas que no hubiéramos hecho en el pasado, cosas que ni nos imaginábamos explorar mientras nos encontrábamos en nuestra zona de confort durante los últimos 18 años”, nos cuenta el cantante Sébastien Izambard, quien admite que tuvieron celos de su juventud y su talento, sentimiento que ya superaron.

Este nuevo aire que encuentra Il Divo llegó en forma de su décimo disco, “XX”, que trae diferentes éxitos como “Perfect” de Ed Sheeran, “Crazy” de Gnarls Barkley, “Always on my mind” de Brenda Lee y Elvis Presley, “Talking to the Moon” de Bruno Mars, “I have nothing” de Whitney Houston, en español, así como una composición original titulada “Despertar sin ti”.

“La canción original Despacito también es una canción que combina perfectamente con el romance. En esta versión, eliminamos cosas que creemos innecesarias para darle una letra más romántica, sin decir todas las partes explícitas que, a nuestro parecer, son obvias para el público”, explica Bühler.

Lo que depara al futuro de la agrupación es viajar por más países sudamericanos para mostrar sus nuevas canciones y consolidar a LaBrie como parte de este cuarteto que necesita de cada uno para “mantener los pies en la tierra”, además de recordarse que, aunque su nombre diga lo contrario, ellos no son divos.