Málaga (DPA)
La cantante española Isabel Pantoja pidió hoy a la Justicia de su país que suspenda su ingreso en prisión para cumplir dos años de cárcel por un delito de blanqueo de capitales.
La artista, de 58 años, fue condenada en 2013 a dos años de prisión y a pagar una multa de cerca de 1,150 millones de euros por haber ayudado al ex alcalde de la famosa localidad de Marbella Julián Muñoz a ocultar dinero negro cuando era su pareja.
La Audiencia Provincial de Málaga (sur) ordenó recientemente a Pantoja entrar en prisión y le advirtió que si no lo hace en el plazo fijado, decretará orden de busca y captura.
En España, cuando un condenado carece de antecedentes penales y la pena es de hasta dos años de cárcel, la Justicia suele eximirle de cumplir el castigo.
Sus abogados lo solicitaron hoy formalmente, argumentando que Pantjoa ha pagado ya 100.000 euros de la multa impuesta y recordando que no tiene antecedentes penales. La cantante, además, presentó un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. También pidió un aplazamiento para pagar el resto de la multa.
Pantoja no es una persona "penalmente peligrosa" y no tiene ningún pleito pendiente con la Justicia, añadieron los letrados.
NO ES TAN FÁCIL
La fiscalía anticorrupción se ha mostrado contraria a suspender las penas de cárcel de otros dos condenados en el mismo proceso a penas menores de dos años. Su argumento es que el dinero blanqueado procedía de la corrupción -la actividad ilícita del ex alcalde Muñoz- y la lucha contra la corrupción es "una prioridad absoluta".
Pantoja fue juzgada entre otros junto a Muñoz y la ex mujer de este, Maite Zaldívar. El ex alcalde se encuentra ya en la cárcel y Muñoz ingresará próximamente en prisión para cumplir dos años y medio.
La tonadillera y Muñoz iniciaron su relación sentimental en 2003, un romance que oficialmente llegó hasta 2009, cuando confirmaron la ruptura después de que el ya ex alcalde hubiera pasado una temporada en la cárcel.
Muñoz fue detenido en julio de 2006, tras una moción de censura que lo había sacado de la alcaldía de Marbella.
Estaba en el centro de la "Operación Malaya", que destapó en la localidad de verano de ricos y famosos la mayor red de corrupción urbanística e institucional en la historia de España y de la que se deriva la causa por la que él y Pantoja fueron juzgados después.
La Audiencia Provincial de Málaga consideró probado que durante esa relación "ejecutaron un plan preconcebido para aflorar dinero y ganancias" que el ex alcalde de Marbella obtuvo en sus actividades delictivas.