Era una noche negra. La lluvia golpeaba con fuerza el techo de una fábrica de osos de peluche. Pronto, un relámpago impacta en sus sistemas eléctricos y la maquinaria comienza a fallar. Entre chispas y cortocircuitos, el último ensamblado emerge entre el humo: es “TOY Lokazo”, un pequeño robot diferente a a cualquier otro producto industrial.
Esa es la historia del personaje creado por el peruano Jaze, quien la detalla en su canción “akel pastel”. Bajo la máscara de este personaje, el músico da rienda suelta a su faceta más polémica y sincera. “Me identifico con TOY Lokazo porque desde chico siempre sentí que era diferente, tenía otra manera de pensar y diferentes ideales que el resto de la sociedad. Él es esa voz mía que no tiene límites, que es fuerte e intensa, que contradice y grita”, dice Juan Carlos Iwasaki [nombre real del artista] en conversación con El Comercio.
Con letras aleatorias y rimas rápidas, la música de “TOYLO” [apelativo usado por sus seguidores] es más moderna, con una especial predilección por el trap, la pachanga y el reguetón; ritmos que los fanáticos le pedían a gritos luego de la sorpresa que se llevaron con su álbum debut, “Personalidad 7″, dominado por el pop melodioso y sencillo.
“Este disco explora esta parte que mucha gente me pedía”, nos dijo el músico. Pero en esta etapa de su carrera no solo quería enfocarse en la música, sino en la caracterización, lo visual. Durante las batallas de la FMS Perú (2022-2023), “TOYLO” se apoderó del freestyler y avanzó firme en la competencia. No tenía idea de que sería un amigo quien le arrebatara la ilusión de su proyecto.
Durante la jornada 10 de la temporada 2 su rival Nekroos, entre insultos y gritos del público, le arrebató la máscara a TOYLO. “Yo iba a realizar un gran concierto de despedida [antes de su viaje a Argentina] como presentación del álbum, pero a raíz de lo que pasó, ya no tenía sentido. La idea central de ese show era quitarme la máscara por primera vez delante de todos”, comenta. Pese al incidente, al poco tiempo se coronó como bicampeón de la FMS Perú, pero ya nada sería lo mismo.
Un paso al costado
El pasado febrero, Jaze anunció su retiro oficial de las batallas de freestyle y, con ello, a su posición en la FMS Internacional. “Las batallas no me gustan [como concepto de ir a atacar]. Obviamente, a veces ‘pisaba el palito’ y terminaba respondiendo, pero no me gusta que ataquen innecesariamente o que digan algo que no piensan solo para ganar”, afirma. Así, la escena peruana perdió a uno de los representantes emblema. “No quería ir a la Internacional porque cuando vas afuera, la gente espera que [seas incisivo] y vayas a atacar; yo no me sentía dispuesto a hacerlo, prefería mi tranquilidad”.
El ex MC Mochilita (como fue apodado cuando era nuevo en las competencias), confiesa que al inicio sí disfrutaba de las dinámicas agresivas. “En la búsqueda de mi crecimiento y la autenticidad de hacer lo que quiero, decidí dar un paso al costado. Claramente me encanta improvisar y seguramente volveré a hacer una exhibición de freestyle, algo que sea netamente para el disfrute y goce de los amantes del género. Lo que realmente me gusta es hacer arte”, dijo.
El polémico episodio que protagonizó junto a Nekroos le ayudó a que el proyecto fuese más conocido y recibiese más apoyo, por lo que junto a su equipo reestructuró lo avanzado y cambiaron la fecha del lanzamiento del disco. “Lo tomé como una oportunidad de respirar un poco más. Estábamos corriendo con el disco porque estaba previsto para febrero, ahora está saliendo en abril. Fue importante mantenerse positivo”, admite. Y aunque la máscara se mantiene, ahora su mentón y boca quedan al descubierto, armando una fusión en el artista y el personaje.
Detrás del disfraz
Desde entonces, ha liberado dos canciones más entre las que se encuentra una colaboración junto a la espléndida voz de Susana Baca. “Tengo la suerte de haber conocido su música desde que era niño”, dice recordando un libro que guardaba con cariño titulado “Orgullos del Perú”, donde la cantante nacional aparecía en una de las páginas de oro. “Compuse ‘Jomalón’ pensando en ella desde el inicio y ahora es un sueño hecho realidad. Yo me acerqué a ella, y conversamos personalmente en su casa de Cañete. Solo con eso yo estaba más que feliz, pero se dio el tiempo de colaborar con un artista joven y nuevo en una canción de hip hop, eso es muy especial. Creo que con los años el tema va a tomar aún más relevancia y peso de lo ya tiene”, asegura.
“A la muerte no le importa qué eliges, mi velero no llegó a tierra fime, no me alcanzó el tiempo pa' despedirme".
El tema inicia con un riff de guitarra melodioso los primeros segundos, para luego dar paso a beats rápidos y enérgicos, donde prevalece el rap de TOYLO. Un detalle que a primera escucha pasa inadvertido en esta canción y todo el álbum, es el nihilismo que recorre las letras, con constantes referencias a la muerte y la desolación. El detalle se hace más presente en la canción principal, “Sektor inesperado de Marfield”, donde con solo un violín y sin pista musical, declama: “¿Soy egoísta por querer morir antes que los que amo? Qué duele más, ¿un disparo o el último abrazo?”
Cuando hablamos de estas letras, Jaze sonríe y explica relajadamente: “El tema de qué hay después de la muerte es la gran duda de mi existencia, por eso muchas veces escribo sobre eso. Creo firmemente en que tiene que haber algo más que no puedo explicar, debe haber una forma de transformación, ya sea incluso que cuando muera mi energía forme parte de la energía de las demás personas; no lo sé”.
No se considera un pesimista o fatalista, solo son emociones que provienen de episodios intensos en su vida. “Aunque suene a ‘floro’, cuando escribo una canción, siempre lo hago desde lo más profundo de mi corazón. Cada palabra la siento y la reflejo con mucha transparencia”. No quiere que sus seguidores se preocupen por su salud mental, ya que comenta que el contenido de sus letras surgen tras hacer un ejercicio que lleva al límite sus sentimientos “para sacar frases y contenido”.
“No es que yo mastique clonazepam en serio”, dijo. Porque esa es la idea de TOYLO, “decir cualquier pastelada [disparate]. Por eso la canción inicial se llama “akel pastel”, porque no habla de un tema en particular, muy aleatorio.” Este álbum sirve como una excusa para divagar sobre las dudas propias de un joven de 23 años, sin necesidad de problematizarlo demasiado.
Para todos aquellos que extrañan al Jaze de “Las Consecuencias” hay buenas noticias. “[En Argentina] podría llevar un curso y perfeccionar mis habilidades, pero sobre todo estoy yendo porque quiero grabar con artistas de allá, y trabajar el [próximo] álbum que ya estoy avanzándolo este año”. Los productores son los mismos que los de su primer disco, por lo que su clásico sonido estará de vuelta. “También haré de todo un poco. Quiero cambiar de aires y conocer gente nueva. Por supuesto que regresaré a Lima, esta es mi casa y aquí está mi familia”, agrega.
Tampoco cierra la posibilidad de realizar el anhelado concierto hasta ahora trunco. Felizmente ahora no está solo, pues lo acompaña Sony Music brindándole la oportunidad de trabajar en cualquier lugar de Latinoamérica. Muy aparte de su crecimiento internacional, Jaze sabe que la mayor parte de su público se encuentra en el Perú y no en Argentina, por lo que pide paciencia, tiempo para encontrarse a sí mismo. Como artista, busca descubrir su esencia y crecer para no convertirse en otro juguete de la industria.