El lunes pasado, Juan Diego Flórez y César Alierta, director ejecutivo de Telefónica, visitaron Mazamari, en la región Junín, donde la Fundación Telefónica opera un proyecto piloto de inclusión educativa que permite que 900 niños se eduquen con el uso de herramientas digitales. Al día siguiente, ambos emprendieron un viaje a Manchay, en el distrito de Pachacámac, donde está ubicado uno de los 13 núcleos de Sinfonía por el Perú, la red de centros de formación musical para niños de escasos recursos creada por Flórez en el 2011.
Estas experiencias dan fe de una coincidencia de intereses que ha desembocado en la creación de Sinfonía Digital, un proyecto que llevará la tecnología digital a cada uno de los núcleos de Sinfonía por el Perú, con la idea de extender este modelo al resto del mundo. El Comercio conversó con el tenor a propósito de esta notable iniciativa.
—¿Cómo se gestó la idea de crear Sinfonía Digital?
Desde el 2011 estoy bastante activo en Europa tratando de conseguir apoyo para financiar las actividades de Sinfonía por el Perú. Gracias a unas amistades en Madrid pude llegar a César Alierta, el presidente de Telefónica, y a José María Álvarez-Pallete, el CEO de la empresa. No fue difícil, pues ambos entendieron rápidamente el valor de la iniciativa. Luego me visitaron en Viena, fueron a ver una ópera, y finalmente han venido al Perú para sellar esta alianza. Y es increíble porque es gente que así nomás no se mueve. Alierta ha ido a Manchay con todo un equipo que ha venido desde Madrid y ha podido constatar la calidad del trabajo que hacemos para cambiarle la vida a estos niños. Entonces se han emocionado. Él va a ver al Papa el 29 de este mes y está llevando un video de Sinfonía por el Perú. Dice que esto lo tiene que ver Francisco.
—¿Qué resultados esperan obtener?
No solo pensamos llevar la tecnología digital a cada nú- cleo de Sinfonía por el Perú, sino también, en una etapa posterior, extender nuestras actividades a todo el país y a toda Latinoamérica con la música mediante el formato digital. Abriremos además un nuevo núcleo modelo este año.
—¿Qué actividades pondrán en práctica en estos centros de formación?
La práctica orquestal y coral seguirá siendo nuestra actividad principal. Pero con esta alianza los niños podrán aprender más fácilmente usando tablets con contenidos especiales sobre educación musical. Podrán conectarse con profesores que están en Miami o en Londres, o podrán tocar una sinfonía de Beethoven a través de Internet con chicos de otros nú- cleos. Hay muchas ventajas. Estamos conversando ahora mismo en la sede de Wayra [la aceleradora de start-ups digitales de Telefónica], un sitio de innovación, y aquí también vamos a trabajar realizando apps para la enseñanza musical.
—¿Siente que esta alianza alentará a otras empresas a darles su apoyo?
Las empresas locales verán que una compañía mundial se fija y apuesta por nuestro trabajo. Y no estamos hablando de una decisión que viene de la filial peruana, sino de la sede central. Esto es muy importante porque demuestra que lo que hacemos es serio y que el atractivo del proyecto trasciende fronteras.
—Finalmente, ¿por qué es tan importante la música en la educación?
La música tiene la cualidad de hacer pensar mejor a los niños. Espiritualmente los hace más grandes. Una niña me decía el otro día en Manchay: "ser pobre no significa ser mediocre". De acuerdo. Nosotros apuntamos a la excelencia. Esta orquesta de ni- ños de poblaciones vulnerables en unos tres años va a ser una de las mejores de Latinoamérica. En el fondo, yo creo que las dos cosas que necesitamos en el Perú son ocuparnos de la niñez y del medio ambiente. Si hacemos eso, todo sale bien. Porque si estos niños respiran un aire viciado que deteriora sus células y sus habilidades cognitivas, ¿cómo van a rendir en el colegio? Nosotros ya estamos de vuelta. Ellos están de ida. Hagámoslo por ellos. Una vez que nos hayamos ocupado de esto, al fin tendrá sentido hablar de teorías macroeconómicas.
NÚCLEOS: Desde su creación en el 2011, Sinfonía por el Perú ha fundado 13 núcleos de formación musical por los que ya han pasado 4.000 niños de escasos recursos.
NUEVOS HORIZONTES: Este año se abrirá un centro digital donde 400 niños se beneficiarán de nuevas herramientas educativas.