Julia Holter: una luminaria indie en Lima

Sonidos que remiten a escenas cotidianas –días lluviosos o las ansias de ocultarse del sol inclemente– en las que se abren atajos hacia zonas mitológicas. Canciones que aluden al refinamiento del espíritu y a los dolores terrenales. Ganchos pop arropados por arreglos preciosistas. Se puede apelar a un sintetizador o a un instrumento que transporta al oyente a varios siglos atrás. Estas cualidades pueblan la propuesta excelsa de Julia Holter, una artista de 31 años capaz de juntar el pasado con el futuro. ¿A qué época apuntan sus creaciones? Difícil de precisar. Su música tiene la magia de la atemporalidad.

Algunos señalan que la estadounidense hace pop experimental. Se le consulta si le molesta ese rótulo. La cantante y compositora responde: "No, ¡está bien! Ni yo sé cómo etiquetar mi música. Así es que es probable que alguien lo haga por mí".
No se equivoca. Su obra conformada hasta el momento por cuatro discos es elogiada por la revista "Mojo" o por el diario "The New York Times". No todo está perdido. El pop todavía puede esquivar la superficialidad en los tiempos de Instagram, y fusionar deleite y complejidad mediante formas accesibles.

Formada en el California Institute of the Arts, Julia Holter es una admiradora de películas que abren caminos –como "El año pasado en Marienbad", con su mezcla de realidad, ilusión y obsesiones fatalistas– o del arte medieval. Sobre esta última expresión, ella comenta que le fascina el arte elaborado con un propósito superior por los monjes del medioevo, el cual genera a su vez una conexión con el individuo. No parece ser casualidad que la música de Holter aspire ir del cielo al llano, y viceversa.
La californiana también practica el deporte de la modestia. No cree que lleva una vida demasiado interesante. Cuenta, además, que tiene hábitos y fobias como cualquiera: acostumbra hablarle a Francis, el perro de su enamorado, mientras pasean juntos; odia viajar en aviones; y se sigue acostando y levantando muy tarde, como si fuera una adolescente o 'millenial' desempleada. Por suerte, la creación se impone a las tentaciones de la procrastinación.

El arte implica búsquedas. O una inmersión en el enigma. Holter considera que "la música es un gran medio para explorar el misterio de la vida". Luego agrega: "La música es física y no necesita mucha explicación o información básica". Ella invoca al oyente a sentirla.

El concierto de Julia Holter en Lima será este miércoles 12 de octubre a las 9 p.m., en Bazar (Francisco de Paula Camino 231, Miraflores).