A los diez años, Ciro Hurtado descubrió su pasión por la música en una vieja guitarra de su padre, desgastada y con solo una cuerda, que luego él mismo restauró con dedicación. Empezó tocando las nostálgicas melodías que emitía Radio Nacional. Poco después, los acordes del rock and roll de los Beatles, que recién llegaban al Perú, avivaron aún más su espíritu musical. Así, sin planificarlo, comenzó un viaje artístico que lo llevaría a conquistar escenarios internacionales y recibir nominaciones tanto al Grammy Latino 2024 como al americano por “Paisajes”, su más reciente álbum inspirado en parajes peruanos.
La carrera musical de Ciro comenzó en sus años de secundaria en Lima, donde tocaba en festivales, recitales de teatro, bodas, cumpleaños e incluso funerales.
“Hacía rock y blues, y también música hermosa con un grupo puneño, aunque no era muy cool tocar folclore si eras rockero. Luego tomé clases privadas de guitarra clásica, y hasta entré a estudiar ingeniería electrónica en la universidad. Para serte sincero nunca entendí nada, solo iba a calentar el asiento. Lo mío era la música”, asevera.
Cuando se aventuró en el mundo del rock, formó el grupo El amigo. Practicaban con guitarras acústicas, ya que no contaban con instrumentos eléctricos propios. Usaban guitarras prestadas para sus presentaciones.
“Éramos jóvenes e inexpertos, ensayamos solo una vez con instrumentos eléctricos prestados el día antes del concierto. En una presentación usé una hermosa Fender Stratocaster, que en ese momento costaba más que un Volkswagen New Beetle usado. Fue la primera y última vez que la toqué”, narra.
Apuesta arriesgada
A los 20 años, el artista moyobambino, inspirado por el rock and roll, decidió probar suerte en la cuna de ese género. Viajó a Estados Unidos con una maleta llena de canciones, sueños y deseos de aprender.
“Vine aquí atraído por la música, quería ser una estrella del rock and roll”, cuenta Hurtado. Sin embargo, al llegar, se dio cuenta de que ese estilo de rock, con su estética de zapatos con plataformas, pelucas largas y maquillaje, no era realmente lo suyo. A pesar de sus deseos iniciales, su verdadero camino lo llevó por un rumbo diferente, y pronto encontró su lugar en la música instrumental y el jazz.
Hurtado fue uno de los miembros fundadores y el director musical del conjunto de jazz folclórico latinoamericano, Huayucaltia. Realizó extensas giras por los Estados Unidos y Perú con ellos, abriendo para artistas como Jackson Browne, Sting, Holly Near y Carlos Vives. Ha grabado y co-producido siete álbumes con la banda.
Durante cuatro años, tocó con el reconocido conjunto de guitarras Strunz & Farah, lo que le abrió las puertas a importantes escenarios internacionales como el Festival de Jazz de Montreux en Suiza, el Festival Folk de Vancouver en Canadá y el Kennedy Center en Estados Unidos, además de realizar una gira por Perú. Su participación en el álbum ”Misterio” bajo el sello Water Lily Acoustics consolidó su carrera, marcando un antes y un después en su vida como músico.
“Cuando empecé a cantar las canciones de los Beatles, no hablaba inglés. En mi humilde criterio creo que la música te llega al corazón primero por la melodía, luego por la letra. Siempre he trabajado eso. Me gusta mucho la música clásica, el jazz, el rock, el folclore, la música celta, la africana y del Medio Oriente. Aprendí de esas influencias un montón”, asevera.
Como compositor ha creado y colaborado en la música de diversas películas y documentales, incluyendo la clásica de Ron Fricke “Baraka”, “Dead Women in Lingerie”, “Max is Missing”, “Hope Street”, “Monsters”, “Peru: The Royal Tour” y “From Wharf Rats to Lords of the Docks”.
Hoy, Ciro Hurtado es un embajador de la música peruana en el extranjero. Fusiona estilos y lleva su herencia musical en cada escenario en el que se presenta. Ha lanzado trece álbumes como solista: “In My Mind”, “Tales From Home”, “The Magic Hour”, “Guitarra, Echoes of the Andes”, “Guitarrista”, “Los Angeles Blues”, “Ayahuasca Dreams”, ”Selva”, “Altiplano, Luna” y “Paisajes”. Con este último ha sido nominado a los Latin Grammy, en la categoría a Mejor Álbum de Música Folclórica, y a los Grammy a Mejor Álbum de Música Global.
“Cuando vivía en Perú, hace ya cinco décadas, viajaba en autobús por distintas ciudades, y sus paisajes —balnearios, desiertos, montañas— me inspiraban melodías. Esa experiencia fue la semilla de ‘Paisajes’. La compuse hace dos años”, cuenta el artista sobre su última apuesta musical.
Esta no es la primera vez que Hurtado recibe una nominación a los Latin Grammy. En 2015 fue considerado para su álbum “Ayahuasca Dream”, inspirado en la magia y el misticismo de la selva peruana.
“Estoy súper contento porque estas nominaciones vienen de colegas, de músicos y de la gente que está en la industria. El valor más grande que tiene es que soy un artista independiente. No tengo el apoyo de publicistas ni de compañías grandes, sin embargo votaron por mi música”, asiente con satisfacción.
Para Ciro las nominaciones al Grammy y al Latin Grammy son más que un reconocimiento personal: son una oportunidad para que los peruanos conozcan su trabajo. Tras décadas de promover la música peruana y fusionar ritmos costeños, afroperuanos, andinos y selváticos, su deseo es que su país reconozca en su obra esa inspiración profunda en el Perú. “Lo que más deseo es que mi música llegue a más peruanos y que conozcan lo que hago aquí, impulsado siempre por el amor a mi país”, subraya.