TV Insomnio regresa: La nueva apuesta de Sergio Galliani por el futuro del rock peruano

“Cuando acabó el programa en Radio América que hacía con Gigi Mitre, me quedé con ganas de hacer más. Entonces pedí que me dieran un espacio en la madrugada, uno donde solo colocaría rock nacional, aprovechando también mi falta de sueño. Así nació Radio Insomnio, la primera versión de este proyecto”, nos cuenta Sergio Galliani en una entrevista con El Comercio.

Tras el éxito del formato radial, apareció la oportunidad de convertir su programa al formato televisivo, surgiendo TV Insomnio en 2002, transmitido por Latina Televisión. Durante ese periodo, tocaron en el programa bandas como Mar de Copas, Rafo Ráez, Ni Voz Ni Voto, 6 Voltios, Amén, Daniel F, y otras agrupaciones de rock nacional emergentes que encontraron en este espacio televisivo una oportunidad para darse a conocer, como es el caso de Zen, quienes presentaron por primera vez el primer single de su primer álbum.

Luego de un breve, pero memorable periodo de 4 meses al aire, la propuesta se convirtió al formato digital en 2004, donde especialistas musicales conversaban sobre las diferentes propuestas que aparecían en el país y en el mundo. Finalmente, en 2013, se vendió el programa online a la empresa Liderman, aunque esto no representó el final de las propuestas Insomnio.

“La radio la cerraron en el 2000 con el gobierno de Fujimori, que cerró los canales de televisión. Ahí dejó de transmitirse en FM. En la televisión, dijeron que nadie nos iba a auspiciar, a pesar de que todo el mundo lo veía y tenía gran acogida. Yo creo que fue por el miedo a la contracultura de ese momento. Después quisimos volver a las radios formales, pero nunca me permitieron ponerlo. Por suerte, llegó el tiempo del internet”, explica Galliani.

Luego de 22 años, TV Insomnio encuentra un nuevo espacio donde continuará promoviendo la cultura del rock en el Perú: el Sargento Pimienta de Barranco. Desde este lugar se buscará explorar y apoyar la escena del rock peruano a través de una serie de conciertos semanales, podcasts, transmisiones en vivo y una gran convocatoria para mostrar a los nuevos talentos locales.

“Recibimos mensajes de 500 bandas de todo el país pidiendo participar, lo cual es positivo porque esta propuesta no solo busca que escuchemos a las mismas bandas de siempre, sino que gente nueva pueda integrarse a la escena rockera y hacerla crecer nuevamente”, menciona Galliani, quien ha estructurado el Sargento Pimienta como una experiencia completa para los amantes del rock.

Al entrar al Sargento Pimienta, los asistentes se encontrarán con una feria de módulos dedicados a la escena del rock, incluyendo tiendas de ropa, merchandising, discos y entradas para conciertos. En un segundo espacio, un instrumento diferente cada semana invita a los músicos a tocar en vivo frente al público del bar. Además, se publica una agenda cultural de los eventos rockeros de Lima. Un pequeño escenario bien equipado dará la oportunidad a bandas emergentes de mostrar su talento, mientras que el gran escenario al fondo albergará a las bandas principales.

“Estas cosas nos crean identidad, le dan una personalidad al país, a los jóvenes y a los adultos también. Además, nos da ese orgullo al decir: ‘tengo una escena musical en mi país’. El fútbol convoca a esa cantidad de personas coreando un himno, la música hace lo mismo, une a la gente, los enfoca en un objetivo y nos hace más unidos”, enfatiza Galliani. “Sé que en nuestro país se escucha más cumbia, pero el rock es importante porque nos hace pensar, construir ideas complejas y criticar lo que ocurre. El rock es un género musical necesario en estos tiempos”, agrega.

El futuro de este proyecto se encuentra en continuar ofreciendo conciertos a bajo costo para conseguir el apoyo suficiente y realizar grandes conciertos y festivales en diversas partes de Lima. Además, abrirán un nuevo formato dentro de este proyecto de TV Insomnio, llamado TV School, un espacio para que las bandas de colegio de todo el país puedan mostrar su música. “Haremos muchas cosas más en el futuro, pero el objetivo es claro: esto debe ser el semillero para hacer que la escena rockera florezca nuevamente, con más fuerza e impulso”, concluye.