Este postre italiano es un clásico de la pastelería mundial y se caracteriza por llevar huevo, bizcocho, café y mascarpone. Si bien el tiramisú se puede disfrutar en una cafetería o restaurante, también es ideal para preparar fácilmente en casa, eso sí, teniendo en cuenta los errores que se deben evitar para que quede perfecto.
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La receta es muy sencilla y siguiendo al pie de la letra los pasos - sin cambiar ingredientes-, se puede tener un irresistible dulce de textura cremosa y ligero sabor a café. Aquí te indicamos 5 cosas que no debes hacer en la cocina.
1. Sustituir el mascarpone
Este queso es el protagonista de la receta y el que aporta la cremosidad tan típica de este postre. Debe estar a temperatura ambiente antes de mezclarlo y nunca hay que reemplazarlo por nata o crema de queso.
2. No usar café recién hecho
El café es el otro indispensable en esta preparación y el que da el sabor particular al tiramisú. Para que termine siendo verdaderamente delicioso debe emplearse café recién hecho.
Miquel Guarro, juez televisivo en el concurso de dulces Bake Off, explicó a La Vanguardia que es importante “no recalentarlo porque si lo hacemos nos dejará gusto amargo o quemado en el postre y nada apetecible”.
3. No empapar correctamente los bizcochos
Para armar el postre se emplean bizcochos de soletilla o bizcotelas que deben estar empapados en café a temperatura ambiente, pues de lo contrario se pueden deshacer. No es recomendable bañarlos mucho para evitar que echen a perder su textura.
Lo mejor es construirlo en una bandeja con laterales altos para ir colocando las bases de melindros remojados. Los expertos aconsejan no hacer más de tres pisos, pues es un postre sin gelatina u otro ingrediente que le de cuerpo y se puede caer al partirlo.
4. No dejarlo refrigerar
Una vez terminado puede resultar bastante tentativo comerlo al instante, pero este es un grave error. Lo mejor es ponerlo en la nevera durante al menos tres horas para que el tiramisú tome cuerpo.
5. Poner en mal momento el cacao
El acabado final de este postre se da cuando está bien frío. Una vez que ha tomado la textura correcta en la nevera se procede a espolvorearlo con una fina capa de cacao de buena calidad. Si se hace cuando aún está caliente quedará como una pasta y perderá su textura aterciopelada.
Receta del tiramisú clásico
Ingredientes:
[inicio-ingredientes]
- 12 bizcochos de soletilla
- 100 g de cacao en polvo
- 100 g de azúcar
- 200 ml de café expreso
- 3 huevos
- Licor de almendras (amaretto)
- 300 ml de nata para montar
- 250 g de queso mascarpone
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Preparación:
[inicio-instrucciones]
- Monta la nata, muy fría, con 50 g de azúcar.
- Separa las claras de los huevos de las yemas. Monta las claras a punto de nieve.
- Mezcla las yemas con el resto del azúcar (50 g) y añade el queso mascarpone suavemente, sin batirlo, y la nata. Pon también las claras con una espátula y realiza movimientos envolventes para que no bajen.
- Disuelve en el café muy caliente 30 g de cacao y un chorrito del licor de almendras.
- Moja ligeramente los bizcochos en el café y colócalos en el fondo de un molde. Vierte la mitad de la crema encima. Pon otra capa de bizcochos igualmente empapados de café y cubre con el resto de la crema. Repite el proceso para tener 3 capas.
- Lleva el postre a la nevera de 3 a 5 horas hasta que esté bien frío.
- En el momento de servirlo, espolvorea el tiramisú por encima con el resto del cacao en polvo tamizado con un colador. ¡Disfruta!
[fin-instrucciones]
FICHA:
Dificultad: baja
Tiempo: 30 M
Porciones: 4
Trucos de cocina que te ayudarán a ahorrar
Muchas veces ahorrar es mucho más fácil de lo que creemos. La clave es comprar bien y barato, planificar lo que se hará en la cocina y no desechar nada. Recurrir a alimentos económicos y sanos como las verduras y preparar en cantidad, siempre pensando en nuestro presupuesto de guerra.
Evita las verduras ya cortadas
Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.
Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos
Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.
Haz caldos
No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.
Busca productos de temporada
El sentido común es básico a la hora de hacer las compras y pensar en el menú de la semana o el mes. Si somos de ir al mercado será fácil saber qué está de temporada porque será lo más económico. A partir de ahí, sólo hay que pensar qué cocinar con eso que hemos comprado a buen precio en el supermercado.