Es el cóctel tradicional del Perú y no solo es delicioso, sino de fácil preparación. El Pisco Sour deleita paladares por su exquisita combinación de pisco y zumo de limón y en un infaltable en celebraciones como Fiestas Patrias.
Su ingrediente estrella está de fiesta cada cuarto domingo de julio, fecha en la que se celebra el Día Nacional del Pisco y también es la base de otros cócteles con sabor patrio como el Chilcano, Pisco tonic, Capitán, entre otros.
El Pisco Sour fue creado en 1920 por el propietario del Morris Bar y desde ese momento cautiva a todo aquel que visite el Perú o viva en él desde que nació, pues es una bebida ideal para un aperitivo, brindar o celebrar y se puede usar diversos tipos de pisco como el quebranta o los elaborados con uva negra criolla, mollar o uvina para tener una mejor variedad.
Aquí te compartimos una receta que se prepara fácilmente y que podrás disfrutar en casa cuantas veces quieras siguiendo el paso a paso de Pedro Cuenca, sommelier de Wong, quien recomienda usar limón criollo debido a su alta acidez y bitter para disminuir la percepción del olor de la clara de huevo.
Ingredientes:
[inicio-ingredientes]
- 3 medidas de pisco
- 2 medidas de jarabe de goma
- 1 medida de zumo de limón
- 1 clara de huevo
- 2 gotas de bitter
- Hielo
[fin-ingredientes]
Preparación:
[inicio-instrucciones]
- En una coctelera o shaker poner el hielo, pisco, jarabe de goam, zumo de limón y clara de huevo. Mezclar por varios segundos.
- Servir sin los hielos y decorar con el bitter.
[fin-instrucciones]
¿Cómo ahorrar dinero al cocinar?
Evita las verduras ya cortadas
Ser un poco perezoso en la cocina suele salir caro, así que a la hora de ahorrar lo primero es tener un cuchillo y demostrarte a ti mismo que eres capaz de cortar esa cebolla o zanahoria. No te harás millonario, pero si practicas mucho eso del corte puede que te ahorres algunos centavos para un gustito.
Nada de desechar verduras y frutas: cremas y batidos
Aquí no se desperdicia nada, como diría la abuela, y más si queremos ahorrar. Las frutas y verduras que estén un poco marchitas pueden tener una segunda vida en forma de sustanciosas cremas y refrescantes batidos. ¿Un plátano mustio? A la batidora con un yogur y tenemos un delicioso batido.
Haz caldos
No sólo como ingrediente para otras preparaciones, sino para improvisar una sopa salvadora. Comprarlo hecho no siempre es buena idea. Pon un día la olla y preparar unos litros de caldo para, de paso, aprovechar algunas de esas verduras que ya no están para aguantar más tiempo.