Dormir le permite al cuerpo recuperarse. No es ningún que tras lograr un sueño placentero, nos levantamos de buen humor y somos más productivos, incluso tomamos mejores decisiones. Sin embargo, ¿qué podemos hacer cuando no podemos descansar?. Ante esta situación, existen una serie de trucos caseros para solucionar este problema.
Teniendo en cuenta esto, existe un hábito fundamental que no debemos olvidar. Nos referimos a la siesta, una costumbre fundamental en edades tempranas que consiste en descansar algunas horas después de la comida del mediodía. Este ‘sueño corto’ influye directamente en el desarrollo del menor de la casa, según reveló una investigación.
La razón por la que es importante la siesta en niños
De acuerdo con el estudio, publicado en la revista ‘Child Developmen’, dormir siestas en el día es beneficioso para el aprendizaje de los niños. Para llegar a dicha conclusión, un grupo de investigadores de la Universidad de Macquarie (Australia) y la Universidad de Oxford (Reino Unido) convocaron a 32 pequeño (entre tres y cinco años) de escuelas infantiles de Sydney.
Durante cuatro semanas, cada niño durmió la siesta de forma regular y participó en varias sesiones destinadas a examinar su conocimiento verbal básico, indica El Confidencial. “Los resultados de la tarea de generalización del conocimiento mostraron un mejor rendimiento después de una siesta que después de despertarse”, señala el informe.
Siguiendo esta línea, los científicos mencionaron que “los hallazgos proporcionan evidencia inicial de que las siestas facilitan la adquisición y aplicación de mapeos de letras y sonidos, habilidades que son cruciales para el desarrollo temprano de la lectura”.
¿Cuánto tiempo hay que dormir la siesta?
La Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos sugiere una siesta efectiva de 20 a 30 minutos para “para mejorar el estado de alerta y el rendimiento sin quedar aturdido o que interfiera con el sueño nocturno”, informa BBC.