Fue el recordado capitán de la selección Sub 20 de Argentina que ganó el Mundial de la categoría en Malasia en 1997 y que tenía como gran figura a Pablo Aimar, hoy miembro del cuerpo técnico de Lionel Scaloni en la Albiceleste que sueña con ganar el Mundial Qatar 2022. Jugó con el Bambino Cassano en Italia. Decidió colgar los chimpúnes a los 28 años. Y desde 2011 es el asistente de Rodolfo Arruabarrena. Diego Markic, uno de los brazos derechos del ‘Vasco’ en la selección de Emiratos Árabes Unidos habló con Deporte Total desde Qatar sobre la Copa del Mundo y cómo está la Albiceleste y Lionel Messi, el que para él es el número uno, el mejor de todos.
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—Estuviste en el estadio Lusail, ¿cómo se vivió la victoria de Argentina sobre México?
Había mucha presión en el ambiente. Pasa que Argentina había llegado con mucha expectativa al Mundial por lo que había hecho en estos tres años en los que estuvo invicta y ganó una Copa América. Era candidato por lo que había generado futbolísticamente, la armonía del grupo. Y el mazazo del primer partido fue fuerte porque el jugador si bien es cierto tiene sed de revancha, también tiene miedo de saber que no hay ningún margen de error.
—Y eso se vio reflejado en un partido que fue demasiado luchado…
Sí, en el primer tiempo sobre todo. Argentina no se animó tanto por el miedo, estaban atados. El segundo tiempo fue mejor, de menor a mayor, y ya cuando Leo (Messi) hizo el gol, apareció la selección a la que estábamos acostumbrados. Empezó a recuperar rápido el balón, a atacar con más confianza, más juego… los jugadores mismos terminaron soltándose un poco. Hay que entender también que hay una gran mayoría de jugadores que están debutando en un Mundial y realmente no es fácil.
—Son 19 debutantes, ¿eso le puede costar caro a Argentina?
Tener jugadores que ya saben de qué se trata un Mundial es mejor, pero muchas veces la inconsciencia de los chicos hacen que justamente eso le juegue a favor. Además, a medida que se va desarrollando el torneo, los jugadores se van ambientando en cómo es, cómo jugar.
—Se jugaron dos fechas y solo tres selecciones han clasificado a octavos. En Rusia 2018 y Brasil 2014, a estas alturas, ya habían siete clasificados. ¿Se está emparejando el Mundial?
Antes se pensaba que el Mundial comenzaba en octavos de final, pero hoy se ha emparejado tanto el fútbol que hay muchas selecciones que en primera ronda son difíciles de enfrentar. Argentina, por ejemplo, está yendo de menos a más. Le costó al inicio. Pero ojalá que el próximo partido contra Polonia sea la confirmación de que se está asentando.
"¡Rispetto per il numero uno!", grita @leleadani. Bellissimo comentario. Los extrañamos, @Azzurri. pic.twitter.com/t68aA99JO6
— Roberto Parrottino (@rparrottino) November 27, 2022
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—¿Ha sido difícil para Argentina encontrar reemplazo para Lo Celso, no? ¿Qué te parece Mac Allister, que jugó en su posición ante México?
Alexis es un jugador muy joven, tuvo una gran temporada en el Brighton, pero en su club está en un puesto distinto, recibe casi siempre con la cancha de frente. En Argentina tiene que jugar un poco de espaldas, jugando a espaldas de los volantes rivales. Pero sí es para destacar que tuvo desparpajo para jugar, fue el que más se animó pese a que era su debut en un Mundial. De todos modos, en esa posición que dejó Lo Celso creo que hay muchas variantes. Está Mac Allister, Papu Gómez, Enzo Fernández, Exequiel Palacios. Ninguno es igual que Lo Celso, pero Scaloni tratará de equilibrarlo dependiendo del rival.
—¿Te sorprende el nivel de Arabia en el Mundial? Le ganó a Argentina y perdió ante Polonia pero jugando muy bien…
Arabia viene creciendo en los últimos años. Además tiene un técnico muy inteligente y tienen la suerte de haber parado el campeonato hace dos meses y poder trabajar. Porque lo que se ha notado es un equipo muy bien trabajado, con las ideas claras. Particularmente no me llama la atención.
—Jugaste con Pablo Aimar en las juveniles de la selección argentina. ¿Viste el video en el que estuvo a punto de llorar tras el gol de Messi? ¿Qué sentiste?
Yo estuve en el estadio. Lo que se vivió… había mucha presión, pero no de la mala, eh. La gente estaba muy ilusionada pero con miedo. Y Pablo igual. Cuando uno quiere mucho algo pasan esas cosas y él ama a Argentina, a la selección.
—¿Y cómo lo vivió la gente en las tribunas, a las afueras del estadio?
Fue muy emotivo. La gente se quedó como dos horas después del partido festejando afuera. Eso demuestra que, más allá de que esto sigue y Argentina aún no se ha clasificado, sacarse la mochila que significó el primer partido era importante porque abre el camino nuevamente para lo que se viene, para que el equipo demuestre el juego que había demostrado hasta antes del Mundial.
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—¿Hablaste con Pablo en el amistoso que jugaron previo al Mundial?
Sí, estuvimos hablando de lo que se venía, recordando también el pasado, los viejos tiempos. De la familia también, que es lo más importante. Yo notaba que estaban muy bien, en lo anímico y futbolístico, pero con algunos jugadores tocados físicamente.
—¿La fecha en la que se está jugando el Mundial lo hace raro, no? Hay muchas jugadores que se lesionaron
Antes los jugadores llegaban con 70 partidos encima pero había más tiempo para recuperarte porque del final de temporada al Mundial había como un mes de diferencia. Ahora en cambio deberían haber llegado más aligerados en cuanto a lo físico, pero a la vez, las últimas dos semanas se jugó con mucha presión porque los jugadores jugaron pensando que una lesión los podía dejar fuera del torneo que siempre espera y sueña jugar.
—Justamente se habló de Messi y una supuesta lesión en el tobillo. ¿Cómo lo viste en el amistoso previo al Mundial?
En el amistoso lo vi muy bien. Lo que pasa es que es un jugador que se autogestiona de la mejor manera. Ante nosotros jugó 90 minutos. Él se conoce, sabe cuándo tiene que correr, cuándo tiene que cambiar de ritmo o cuándo caminar. Él necesita agarrar su ritmo estando dentro del campo, es un animal competitivo.
—Después del partido ante Arabia se hablaba del Messi que no era líder, que no sabe contagiar a sus compañeros. ¿Tú crees lo mismo?
Cuando eres el número uno, siempre tienes detractores. Y cuando las cosas no salen bien, con pocos argumentos dicen cosas que se repiten y repiten hasta que se quedan en el aire, como eso de que en un partido importante no aparece. Ante México quedó demostrado que no es así. Pero también tiene goles en finales, en clásicos ante el Real Madrid. Sinceramente eso es un tema que no merece debate ni un solo minuto. Es el número uno y cuestionar eso, del carácter o futbolístico, no tiene sentido.
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—Leo ha tenido un arranque igual al de Brasil 2014 donde se vio su mejor versión en los mundiales. ¿Este será su Mundial?
Ojalá lo pueda ganar, pero no es que lo necesite para demostrar que es el número uno. Su carrera no lo necesita. Claro que puede ser la frutilla del postre, sería una satisfacción enorme. Es lo único que le falta. Pero, repito, él es muy grande, lo ha demostrado.
—¿Esta versión de Messi con 34 años es mejor a las anteriores?
No sé si es el más determinante, pero sí es el mejor Messi, el más completo desde que empezó su carrera. Tiene más asistencias, más tiros libres. Ha mejorado muchísimo en su forma de ver y entender el jugo.
—¿Hoy Messi es el capitán que tanto pedían?
Era un poco lo que todos estaban esperando. Pero creo que hay distintos tipos de líderes. Pasa que en Argentina esperan que sea como Maradona, pero él es otro tipo de líder. Diego era carisma, desde la presencia te genera un montón. Messi es más reservado pero es muy respetado y escuchado dentro del grupo. Cuando te toca enfrentarlo, te genera un respeto que pocas veces vi. Tiemblas y ves a los jugadores esperando para sacarse una foto con él. Diego y Leo generan eso. Pero en este último tiempo sí se ve a Messi un líder como pidió la gente, un líder de palabra. Pero antes igual lo era.
—¿Cómo es Messi como persona? Todos quieren que gane el Mundial, pero a su vez en las últimas horas desde México algunos los critican por supuestamente patear la camiseta de esa selección tras el triunfo…
Creo que eso de que quieran que gane el Mundial es porque ha dicho que va a ser el último que juegue. Pero Leo genera eso también. Ese respeto, ese amor. En la cancha (ante México), por ejemplo, habían hinchas que alentaban a la selección pero no eran argentinos. En Italia hace poquito se hizo una encuesta de quién querían que gane el Mundial y la mayoría decía Argentina por Messi. Es lo que pasa en todo el mundo, es lo que él genera como jugador y persona. Él es respetuoso dentro y fuera de la cancha, nunca ha tenido problemas con los rivales. Ojalá pueda ganar el trofeo, lo merece por lo que nos ha dado durante tantos años.
—¿A Messi lo aman por el Medio Oriente?
Te voy a contar una anécdota. Cuando la selección de Emiratos Árabes juega, pocas veces se llenan los estadios. Pero cuando jugamos contra Argentina, lo que se vivió fue impresionante. El estadio estuvo repleto. Lo llamativo es que no solo eran argentinos, la gran mayoría eran indios, filipinos, bangladesíes. Como te dije, él se ha ganado un respeto por cómo es como persona. Por eso más allá de que los demás quieren que su selección gane el Mundial, si no lo hacen, quieren que sea Argentina por Messi. Por él, no por Argentina, sino por él.
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—¿Esta Argentina depende mucho de cómo esté Messi?
Eso es lo que pasa en todas las selecciones que tienen un jugador distinto. Francia depende mucho de Mbappé hoy. No es la misma que salió campeona en Rusia 2018. Lo mismo pasa con Neymar, que lamentablemente ahora está lesionado. Y con Argentina es lo mismo. Hay un equipo que respalda a Messi, pero es tan determinante que acapara todo, es difícil sacarle los ojos. Los mismos compañeros sienten eso porque tenerlo ahí obliga a pasarle la pelota. Es un imán.
—¿Argentina está para ser campeona del mundo?
Es muy difícil porque el Mundial es muy difícil. No siempre gana el que mejor juega sino el que mejor está. Cuando Argentina se saque los nervios, entre en torneo y vuelva a creer en sí misma, seguramente será candidata. Tiene plantel para ilusionarse.
—¿Brasil sí es candidato? Neymar está lesionado…
Brasil siempre es candidato. Tiene el Mundial en el ADN. Siempre compite. Es increíble lo que son como selección. Obviamente que la baja de Neymar es importante, pero como ante Suiza, si no está él, en el banco están Antony, Gabriel Jesús, Gabriel Martinelli… es impresionante. Ojalá se recupere Neymar pronto. A mi me gusta que el Mundial tenga a los mejores, para eso esperamos cuatro años.
—¿En este Mundial se está viendo el crecimiento del fútbol asiático?
El fútbol de por sí se está emparejando. Hoy se pueden dar resultados como el de Arabia-Argentina, algo que antes no sucedía. Las ligas también van creciendo, se van haciendo más profesionales. Claro que lleva su tiempo cambiarle la mentalidad al jugador.
—¿Cómo es la mentalidad del jugador en el Medio Oriente, qué lo diferencia de Sudamérica? Perú tiene tres representantes ahí: Carrillo, Cueva y Valera.
En Sudamérica, por necesidades, el fútbol es un atajo hacia una vida mejor, por eso forjan esa competitividad para ser el mejor y salir a Europa. Acá no pasa eso. De hecho, todos los jugadores de Arabia y Emiratos Árabes juegan en sus ligas. Lo mismo pasa con Qatar. Hay una diferencia cultural que es difícil de zanjar, pero se empareja con otras armas como tener dinero para mejorar la liga, que crezcan los clubes. Acá se ve Europa como algo muy lejano todavía. Ojalá que el nivel que están mostrando los equipos asiáticos sea un punto de inflexión para crecer y que los jugadores de acá crean que pueden ser de élite.
This is the power of football ❤️@Argentina fans in Bangladesh celebrating Lionel Messi's goal in the #FIFAWorldCup victory over Mexico last night 🙌🇦🇷pic.twitter.com/HSE6JGGRsw
— FIFA.com (@FIFAcom) November 27, 2022
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