Cairns. Un juez en Australia rechazó el lunes la solicitud de la defensa a favor de una mujer acusada de matar a ocho niños, entro ellos a sus siete hijos, de que la próxima audiencia se efectuara en un tribunal de salud mental.
Mersane Warria, que en la corte también fue nombrada como Raina Mersane Ina Thaiday, enfrenta ocho cargos de homicidio por la muerte de siete de sus hijos y una sobrina, cuyos cadáveres fueron encontrados la semana pasada dentro de su casa en el norte de Australia.
La policía acudió el viernes en la mañana a la casa en Manoora, suburbio de Cairns, después de que alguien avisara de una mujer con heridas graves.
Cuando llegaron al lugar, encontraron los cadáveres y a Warria, que tenía heridas de cuchillo en el pecho.
Warria, de 37 años, no asistió el lunes a una breve audiencia en la Corte de Magistrados de Cairnes, porque se recuperaba de las heridas en un hospital.
El magistrado Alan Comans rechazó la solicitud del abogado defensor, Steve MacFarlane, de que la próxima audiencia del caso se efectuara en un tribunal de salud mental.
Los casos penales a veces son remitidos a ese tipo de tribunales si se considera que el acusado tiene problemas mentales o alguna incapacidad intelectual. El tribunal decide después cuál era la condición mental del acusado cuando cometió el delito.
Afuera del tribunal, MacFarlane dijo que su clienta será examinada por psiquiatras, según lo previsto, y que el caso todavía podría ser llevado en un tribunal de salud mental una vez completada la evaluación.
"Creo que posiblemente ella sabe lo que ha ocurrido pero no se da cuenta y todavía no lo comprende", agregó. "He conversado con ella y hace lo mejor que puede por el momento", afirmo.
El caso fue aplazado hasta el 30 de enero.
La policía se ha abstenido de precisar las causas de las muertes de los niños, pero el inspector detective de la policía de Queensland, Bruno Asnicar, dijo que examinan diversos cuchillos que estaban en la casa que pudieron ser el arma utilizada en los homicidios. La asfixia también está señalada como posible causa de las muertes, agregó.
"Consideramos esa probabilidad y por eso nos está tomando un poco de tiempo", dijo el domingo. "Podría tratarse de una amplia gama de situaciones, desde asfixia hasta miles de otras cosas más", apuntó.
CASA SERÁ DEMOLIDA
La casa de Cairns, al noreste del país, donde el viernes fueron hallados los cuerpos de los niños será demolida y se levantará un monumento de recuerdo en su lugar, informaron hoy fuentes oficiales.
Familiares y amigos siguen rindiendo tributo a los fallecidos cerca de la casa del barrio de Manoora, donde la policía encontró muertos a los cuatro niños y cuatro niñas de entre 2 y 14 años, cuyas identidades no han sido facilitadas por razones culturales.
La familia pertenece a la comunidad indígena del estrecho de Torres, población autóctona originaria de las islas cercanas a las costas del estado de Queensland.
El diputado de la circunscripción, Gavin King, dijo que tras conversar con familiares y vecinos, se ha acordado derrocar la casa y construir un memorial que se definirá de acuerdo con las tradiciones de la comunidad aborigen local.
"Consultaremos con la familia, propietarios tradicionales y los vecinos. El gobierno estatal seguro que no será quien vendrá aquí y decidirá cómo será ni, evidentemente, cuando se hará", dijo King en declaraciones recogidas por la cadena ABC.
El inspector Bruno Asnicar dijo que la casa permanecerá acordonada varios días mientras sigue la investigación en la que se han recopilado varias pruebas y tomado declaración a un centenar de testigos.
Fuente: EFE/ AP