En agosto, la administración Trump hizo público un documento titulado “Marco estratégico para el hemisferio occidental”. En la primera línea de su presentación general, se dice que “el hemisferio occidental es una prioridad geopolítica para Estados Unidos”. Cuando Robert O’Brien, asesor de Seguridad Nacional de Donald Trump, presentó el documento, insistió en que el hemisferio es “increíblemente importante para Estados Unidos y ha sido ignorado por demasiado tiempo”.
Confieso que esas declaraciones me producen perplejidad. En primer lugar, porque la estrategia de seguridad nacional que la administración Trump aprobó en el 2017 no le concedía similar relevancia a nuestro hemisferio y no se ha presentado ningún documento similar sobre otra región del mundo.
- Policía de Estados Unidos intercepta un paquete con el potente veneno ricina dirigido a Trump
- Trump quiere designar rápidamente al sucesor de RBG y la campaña electoral en EE.UU. se sacude
- “No creo que la ciencia sepa”: los insólitos embates de Trump contra expertos a pocas semanas de las elecciones
En segundo lugar, Donald Trump es el presidente de Estados Unidos desde enero del 2017. Así que, cuando menos desde entonces, él sería responsable de que, pese a su presunta importancia, el hemisferio haya sido ignorado. Por ejemplo, solo viajó una vez durante su presidencia hacia otro país del hemisferio (Argentina en el 2018), y fue para asistir a una cumbre del G-20, no a un evento de interés regional.
En tercer lugar, Trump no ha tratado a los gobiernos de la región (incluyendo aquellos que lo consideran un aliado contra el comunismo, como el de Bolsonaro) precisamente con simpatía. La lista de acciones hostiles sería larga de enumerar, así que solo mencionaré algunos ejemplos conspicuos. En el caso de México, estas van desde la propuesta del muro fronterizo hasta la amenaza de sanciones comerciales si ese país no retenía en su territorio a los inmigrantes en tránsito hacia Estados Unidos. O la separación de familias en la frontera y el retiro de la ayuda oficial a países centroamericanos con un propósito similar. La suspensión del programa de reunificación familiar para inmigrantes cubanos en el 2017. La denegatoria de la mayoría de pedidos de asilo por parte de inmigrantes venezolanos. El anuncio de aranceles punitivos contra las importaciones de acero y aluminio procedentes de Argentina y Brasil en el 2019. El intento de cancelar el programa migratorio DACA (que afectaría a unos 8.000 jóvenes peruanos). Y así sucesivamente.
El contexto electoral
Aunque no sostengo que el documento haya sido concebido con fines electorales, puesto en contexto cuesta creer que un presunto cambio de política hacia nuestra región haya sido presentado un par de meses antes de las elecciones solo por coincidencia. La presentación, por ejemplo, se hizo no solo en un estado pendular como Florida, sino específicamente en el sur de ese estado, ante una audiencia compuesta por inmigrantes colombianos y venezolanos en West Palm Beach (bueno, tal vez el hecho de que exista allí un Trump Plaza sí sea una mera coincidencia).
Por último, tampoco parece fruto del azar que, dentro del hemisferio, el documento ponga un énfasis particular en lo que el exasesor de Seguridad Nacional John Bolton denominó la “troica de la tiranía”: Cuba, Nicaragua y Venezuela. Es decir, los países de origen de comunidades de ciudadanos estadounidenses que comparten un par de características.
De un lado, una gran proporción de las comunidades provenientes de esos tres países en Estados Unidos viven en Florida. De otro, son comunidades que, por su oposición mayoritaria a los regímenes que prevalecen en sus países de origen, suelen compartir una ideología anticomunista que favorece la adopción de medidas coercitivas para ponerles fin. Es decir, se trata de comunidades en las que una mayoría (menguante entre cubanoamericanos) de quienes las integran compartiría propuestas de política hacia esos regímenes similares a las que propone el documento en mención. Y, a juzgar por las encuestas, el uso político del tema le estaría dando a Trump un rédito electoral.
Nuestra siguiente columna se centrará en el contenido del denominado “Marco estratégico para el hemisferio occidental”.
______________________
VIDEO RECOMENDADO
TE PUEDE INTERESAR
- Rusia quiere vacunar contra la COVID-19 a toda América Latina: “La región es nuestra prioridad”
- La normalidad no volverá “hasta mediados o finales del 2021”, dice jefe epidemiólogo de EE.UU. Anthony Fauci
- Menores que agredieron a dos ecuatorianos en el Metro de Madrid fueron detenidas | VIDEO
- México: padre mata de una puñalada al acusado de violar a su hija | VIDEO
- Irán ejecuta al luchador profesional Navid Afkari, acusado de asesinato durante las protestas del 2018
- Quién es Mauricio Claver-Carone, el polémico lobista cubano-estadounidense que Trump catapultó a la presidencia del BID
- “India horrible”: argentina que gritó frases racistas a una mujer se fue de México y le prohíben regresar al país