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Atenas. La alianza de izquierda Syriza, que prometió acabar con la política de austeridad adoptada en Grecia tras la crisis de deuda, ganó con el 36,4 por ciento de los votos las elecciones parlamentarias celebradas el domingo en el país, aunque no alcanzó por escaso margen la mayoría absoluta.
"Hoy hicimos historia", señaló el líder de Syriza, Alexis Tsipras, de 40 años, quien se podría convertir en el primer ministro más joven de la historia del país, ante miles de seguidores en Atenas. Además, expresó su disposición a negociar una salida al problema de deuda que enfrenta Grecia.
"A partir de mañana comienza el trabajo duro", manifestó. Tsipras aseguró que está dispuesto a hablar con los socios de la Unión Europea (UE) sobre una "solución justa y practicable".
De acuerdo con el instituto de opinión Singular Logic, que trabaja junto con el Ministerio del Interior, tras el recuento del 95 por ciento de los sufragios, Syriza contará con 149 o como máximo 150 escaños en el nuevo Parlamento griego. Para contar con la mayoría absoluta se necesitan 151 de los 300 escaños.
Por su parte, el hasta ahora gobernante partido conservador Nea Dimokratia obtuvo el 27,8 por ciento y contará con 76 escaños en el Parlamento.
El socio menor de la coalición de los conservadores, los socialistas de Pasok, sacaron 4,7 por ciento de los votos y con ello 13 escaños.
En el tercer puesto, la formación ultraderechista Amanecer Dorado obtuvo hoy el 6,3 por ciento y 17 escaños, mientras que el partido centrista proeuropeo To Potami (El Río) logró el 6 por ciento y 17 escaños.
Además lograron entrar al Parlamento los comunistas, con el 5,5 por ciento y 15 escaños, mientras que los populistas de derechas de los Griegos Independientes lograron también superar la barrera del tres por ciento y con 4,7 por ciento de los votos ganaron 13 escaños. El partido del ex primer ministro socialista Giorgos Papandreou, en tanto, sacó apenas del 2,4 por ciento.
El hasta ahora presidente del Parlamento, Evangelos Meimarakis, buscará según informaciones de dpa el lunes al mediodía al jefe de Estado, Karolos Papoulias, en su residencia, para informarlo sobre el resultado de la elección. Luego, el presidente dará a Tsipras como jefe del partido con más votos un mandato de tres días para sondear a posibles socios para un gobierno de coalición.
La formación de un gobierno bajo el liderazgo de Tsipras era considerada segura el lunes por la madrugada en Atenas. Los Griegos Independientes y el centrista To Potami ya se declararon dispuestos a negociar con Tsipras. Tampoco se descarta un gobierno de minoría liderado por él.
Los comicios de hoy se consideraban decisivos para la permanencia de la endeudada Grecia en la eurozona. Tsipras quiere frenar el programa de recortes y lograr una quita de la deuda. Si no hubiera acuerdo en este aspecto, en el peor de los escenarios Grecia podría salir de la moneda común.
De todas formas, el líder de Syriza defiende la permanencia de Grecia en la UE y en la zona euro.
Miles de griegos tomaron las calles en la noche del domingo para celebrar la victoria de Syriza. Muchos de ellos se reunieron en el centro de Atenas en una plaza conocida como Plaza de las Lágrimas por su trágico pasado.
"Los griegos derramaron lágrimas de tristeza en esta plaza, y ahora finalmente están derramando lágrimas de alegría y esperanza de un nuevo mañana para el país", dijo Giorgos Balabanis, un taxista de 44 años.
"Ya tuvimos bastante de la austeridad sin fin, el desempleo, los suicidios y miseria que han caído sobre el pueblo griego. Esta es una nueva era, no sólo para Grecia, sino para toda Europa: la gente, no los bancos, tienen el poder", afirmó Sofia Korsavidou, una maestra de 50 años.
La UE y el Fondo Monetario internacional (FMI) ofrecieron a Grecia un paquete de rescate de unos 240.000 millones de euros (unos 268.000 dólares) que finaliza el 28 de febrero. El eurogrupo evalúa actualmente si extender el programa más allá de esa fecha.
Los ministros de Finanzas de la UE se reunirán este lunes para hablar sobre Grecia, aunque no se prevén decisiones concretas. El ministro de Finanzas belga, Johan Van Overtveldt, reaccionó con frialdad: "Querer poner fin a la reconstrucción en Grecia y permanecer al mismo tiempo en el eurogrupo es irreconciliable".
El país emergió de una recesión de seis años en noviembre, pero el desempleo continúa estando en cerca del 25 por ciento y la deuda pública se ubicó el año pasado en el 175 por ciento del producto interno bruto (PIB).
Las elecciones adelantadas fueron decididas en diciembre, después de que Samaras fracasara por tercera vez en su búsqueda de apoyo parlamentario a su candidato a presidente.
REPERCUSIÓN EN ESPAÑA
En tanto, el Partido Popular (PP) del jefe del Gobierno español Mariano Rajoy se mostró hoy preocupado por lo que consideró "el triunfo del radicalismo de izquierda" en Grecia, aunque descartó la posibilidad de contagio en España.
Por su parte el líder del partido "hermano" de Syriza, Podemos, el profesor universitario Pablo Iglesias, aplaudió hoy la victoria de la coalición griega de izquierda y aseguró que 2015 será "el año del cambio", también en España.
El triunfo de Syriza marca "la cuenta atrás" para el gobierno de Rajoy, dijo hoy en un acto público.
Fuente: DPA
