El huracán Otto perdió fuerza el jueves por la tarde mientras cruzaba el sur de Nicaragua y se convirtió en huracán categoría 1. Tanto este país como el norte de Costa Rica se mantenían en alerta, aunque la previsión era que seguiría debilitándose.
Al menos nueve muertos dejó el paso de Otto por el norte de Costa Rica. "La cifra de personas fallecidas es de nueve, hemos levantado ocho cuerpos, solo nos queda uno pendiente", dijo el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Walter Espinoza, en conferencia de prensa junto al presidente costarricense Luis Guillermo Solís y otros altos funcionarios.
"Se decretará un duelo nacional de tres días a partir del lunes, cuando se haya completado las labores de búsqueda y rescate", dijo por su parte el mandatario.
Aunque el gobierno no ha precisado cifras de desaparecidos, fuentes municipales y medios de comunicación mencionan entre 20 y 25 personas cuyos paraderos son desconocidos tras el paso del huracán.
Según el Centro Nacional de Huracanes de Miami, Otto tocó tierra como categoría 2 el mediodía del jueves en la costa nicaragüense cerca de la ciudad de San Juan del Sur con vientos sostenidos de 175 kilómetros por hora, pero posteriormente se fue debilitando y al caer la noche los vientos eran de 120 kilómetros por hora. No obstante, se mantenía el peligro de que pudiera provocar lluvias fuertes e inundaciones.
Al caer la noche, Otto se encontraba a 10 kilómetros al suroeste de San Carlos y se movía a 19 kilómetros por hora hacia el oeste, bordeando el lago Nicaragua, por la zona cercana a la frontera con Costa Rica. El Centro de Huracanes preveía que continuaría perdiendo fuerza durante la noche y saldría por el Pacífico el viernes temprano, ya convertido en tormenta tropical.
Las intensas lluvias que acompañan al meteoro causaron tres muertes en Panamá.
Nicaragua decretó emergencia nacional en previsión de los efectos no solo del huracán sino también por el temblor de 7 grados que, aunque sin daños reportados de forma inmediata, sacudió Centroamérica el jueves por la tarde. El sismo tuvo su epicentro en el Pacífico frente a las costas de El Salvador.
La portavoz del gobierno nicaragüense, Rosario Murillo, dijo que una mujer de 57 años murió en San Juan del Sur de un infarto después del temblor y cuando se emitió la alerta por tsunami que fue desactivada horas después.
Rosario Murillo indicó que las autoridades continúan con la evacuación de las zonas más afectadas "porque después del paso del huracán vienen las lluvias intensas y con los suelos saturados, siempre hay gran riesgo por la crecida de los ríos".
Nicaragua cerró todas las escuelas y el gobierno había previsto evacuar a más de 10.000 personas, sobre todo de la zona cercana a la localidad de Bluefields, en la costa caribeña, que se encuentran en zonas muy bajas que corrían el peligro de verse afectadas por la subida de la marea.
Cleveland Rolando Webster, alcalde del archipiélago de Corn Island, islas turísticas situadas frente a Bluefields, dijo en entrevista con medios oficiales que Otto había dejado olas de tres metros y medio y daños en casas, pero las familias afectadas se encontraban bien y en refugios.
Las regiones con más peligro eran las zonas bajas del Caribe sur, Río San Juan, Zelaya Central, Chontales, Boaco, Rivas y Granada, pero el gobierno extendió la alerta roja a áreas del centro del país.
En Costa Rica, el gobierno declaró el alerta en todo su territorio por un periodo de 48 horas. La tarde del jueves, la Comisión de Emergencias costarricense indicó que hay 231 comunidades afectadas en la zona del centro norte del país, junto a la frontera nicaragüense, de las cuales 23 se encontraban aisladas por daños en carreteras.
La misma comisión cifró en 933 las personas que han buscado refugio en albergues.
El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, advirtió que las evacuaciones en las zonas de más alto riesgo eran obligatorias y la policía tenía orden de sacar a las personas de esos lugares.
La Comisión Nacional de Emergencias costarricense habilitó 16 albergues para que se refugien 1.335 personas en distintos puntos de la costa Caribe, el Pacífico Sur y la zona central del país.
La entrada de Otto como huracán categoría 2 fue calificada de "inédita" para Costa Rica pues según el Instituto Meteorológico del país nunca en 174 años se había registrado el paso directo de un huracán sobre su territorio.
El presidente Solís había advertido que Otto podría dañar los cafetales y otros cultivos clave en Costa Rica. Nicaragua teme también las repercusiones para los agricultores ya que los cultivos de café están casi listos para su cosecha.
Otto podría poner "en riesgo la seguridad alimentaria de los pequeños granjeros que dependen del maíz, frijol, cacao, miel, café y ganado para sobrevivir", dijo Jennifer Zapata, directora regional de Heifer Internacional, un grupo estadounidense que lucha contra la pobreza.
Fuente: AGENCIAS