El Centro Wiesenthal eliminó hoy al jerarca nazi Alois Brunner de la lista de los criminales más buscados dado que hace cuatro años ya se había obtenido de un agente secreto alemán la información de que éste había muerto en Damasco y había sido sepultado.
"Siempre tuvimos la esperanza de obtener pruebas más firmes para esta información, pero no lo logramos", dijo hoy a DPA el director del Centro Wiesenthal en Jerusalén, Efraim Zuroff.
Nacido en 1912, Brunner era el brazo derecho de Adolf Eichmann, el principal responsable del exterminio de judíos durante la II Guerra Mundial.
Brunner fue el responsable de la deportación de 128.500 judíos a los campos de exterminio y escapó a varios intentos de asesinato con cartas bomba, atribuidas al Mossad, los servicios secretos israelíes.
Alois Brunner fue visto por última vez en Damasco en el 2001.
"En el mundo árabe, los criminales nazis eran celebrados como héroes", dijo Zuroff. Sin embargo, no se puede decir que Brunner haya pasado completamente inadvertido tras el Holocausto. "Perdió un ojo y tres dedos ya que dos veces recibió cartas-bomba", aseguró. "Al parecer se las envió el jefe del Mossad en París de ese entonces, Izthak Shamir", contó.
Según los nuevos datos que maneja el Centro Wiesenthal, Brunner se instaló en Damasco en los años cincuenta y fue asesor del presidente Afez el Asad, padre del actual dictador sirio. “Podíamos decir que le instruyó en asuntos como la tortura o la deportación de personas”, agregó Zuroff.
“Podemos decir que es el último gran criminal de guerra, el último jerarca nazi que ha fallecido”, enfatizó Zuroff.
En su último informe, el Centro Simon Wiesenthal definió a Brunner como “el más importante criminal nazi que no ha sido procesado y que podría estar todavía vivo, aunque la probabilidad de que haya muerto aumenta cada año, dado que nació en 1912”.