"Le dijimos que teníamos hambre. El soldado nos dijo que agarráramos su pene".
El testimonio es de uno de los niños entrevistados en un informe comisionado por Naciones Unidas tras denuncias de abusos de menores en República Centroafricana por parte de soldados franceses en misión de paz.
Los menores acusaron a los militares franceses de exigir sexo oral y todo tipo de actos sexuales a niños hambrientos, algunos huérfanos, a cambio de comida entre diciembre de 2013 y mayo de 2014. En algunos casos las denuncias son de violación, según trechos del documento divulgados en la prensa británica.
Anders Kompass, un funcionario de la ONU con 30 años de antigüedad, frustrado por la lentitud de la organización en responder a denuncias de abuso, decidió pasar el informe confidencial a las autoridades francesas.
Anders Kompass fue suspendido por la ONU luego de que denunciara a los soldados franceses por abuso sexual a niños. (BBC)
El escándalo salió a la luz en abril de este año y generó la suspensión de Kompass y duras críticas a la ONU, pero hasta ahora ninguna condena.
Las organizaciones y figuras prominentes lanzaron en Nueva York una campaña llamada Código Azul, en la que piden una acción radical: que se quite la inmunidad al personal de la ONU acusado de abusos sexuales.
"Si no tomamos medidas drásticas la impunidad continuará", dijo a BBC Mundo uno de los impulsores de la campaña, el general Romeo Dallaire, comandante de los cascos azules de la ONU en Ruanda durante el genocidio de 1994 y creador de una fundación para niños soldados.
Además de Dallaire, la campaña lanzada incluye entre sus impulsores a Graça Machel, la viuda de Nelson Mandela, y a Paula Donovan, directora de la organización AIDS Free World.
Para Dallaire, "a pesar de todo el trabajo hecho por más de 10 años sobre este tipo de crímenes la situación en el terreno sigue igual".
"PODRÍAMOS HABER HECHO MEJOR LAS COSAS"
El informe sobre abusos en República Centroafricana fue finalizado en junio del año pasado. Poco después Kompass pasó el documento confidencial a Francia.
El alto comisionado de la ONU , Zeid Raád Al Hussein, reconoció la demora de pasar la información a los fiscales de Francia. (BBC)
Las autoridades francesas iniciaron una investigación el año pasado, pero sólo informaron de ella luego que se desatara el escándalo el mes pasado, y aseguran que la demora en el proceso se debió a la lentitud de la ONU en proveer información.
Este mes el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Raád Al Hussein, admitió el retraso de su organización en permitir a los investigadores franceses entrevistar al autor del informe confidencial.
"Toda la operación fue prolongada. Y es necesario que tanto la ONU como los estados miembros busquen formas de acortar este proceso. Podríamos haber hecho mejor las cosas en términos del tiempo que ha llevado", dijo Hussein a la prensa en Ginebra.
"LA ONU HA FALLADO"
Si bien los soldados franceses no estaban bajo control directo de la ONU, sino de Francia, el abuso fue identificado en un informe de la organización.
El personal civil de la ONU goza de inmunidad y los militares en misiones de paz sólo pueden ser juzgados por sus propios países. (BBC)