Más de cinco millones de fieles en México arribaron a la Basílica de la Virgen de Guadalupe para rendirle tributo a la "virgen morena" con oraciones y cánticos, que comenzaron en la noche del viernes con las tradicionales "Mañanitas" y danzas prehispánicas.
Niños, jóvenes, ancianos y familias, en agradecimiento a una petición recibida, caminaron varias horas y en las cercanías del recinto sagrado. Muchos de ellos lo hicieron a pie o de rodillas, con imágenes de la virgen, estandartes y arreglos florales. El gobierno de Ciudad de México desplegó un operativo de seguridad con más de 3.000 policías en el entorno a la Basílica, para garantizar la seguridad de los fieles.
Música de banda, cánticos y rituales prehispánicos han adornado esta fiesta que arrancó el viernes, cuando fieles católicos de todos los rincones de México y de otros países empezaron a llegar a la Basílica, en el norte de la capital, para venerar a la Virgen de Guadalupe, que según relatos, se apareció en varias ocasiones al indígena Juan Diego.
Según la tradición de México, la Virgen de Guadalupe pidió a Juan Diego que en ese sitio se erigiera un templo y como muestra dejó impresa su imagen y varias rosas en su tilma o ayate -una especie de capa rústica-, en un hecho que se conoció como "el milagro de las rosas".
En el cerro del Tepeyac, México, donde antes de la Conquista existía un adoratorio prehispánico dedicado a la diosa Tonantzin, la virgen se apareció entre el 9 y el 12 de diciembre de 1531 al indígena Juan Diego, canonizado por el papa Juan Pablo II en 2002.
Fuente: DPA/EFE