Con el paso de las horas se van conociendo los testimonios de los sobrevivientes de la peor tragedia en el Mar Mediterráneo, donde el domingo murieron unas 800 personas en el naufragio de un barco que había partido de Libia rumbo a Italia.
"Nos salvamos agarrados a los cadáveres", señaló uno de los sobrevivientes, según el diario español "El Mundo".
"Así es como consiguieron mantenerse a flote al menos dos de esos 28 afortunados que lograron mantenerse con vida. Chapoteando a tientas en medio de los cuerpos de sus compañeros y pegando gritos para que las barcas de rescate los localizaran", según "El Mundo.
En una conferencia de prensa en Catania, Sicilia, el fiscal Giovanni Salvi dijo que "La mayoría de los inmigrantes no se pudieron salvar porque muchos estaban encerrados en la bodega del pesquero". Agregó que cientos más fueron encerrados en un segundo nivel del barco, que también llevaba a cientos de migrantes amontonados en la parte superior de la cubierta.
Salvi dijo que los migrantes corrieron hacia un lado de la embarcación cuando vieron aproximarse un barco de bandera portuguesa de transporte de contenedores, en una situación en la que el rescate contribuyó al desastre.
"Los barcos mercantes carecen de adiestramiento adecuado para efectuar rescates en el mar", advirtió Salvi. "El hecho es que los rescates marinos son difíciles y obligan el profesionalismo".
En tanto, los fiscales anunciaron el martes el arresto del capitán tunecino y un sirio miembro de la tripulación del barco que zozobró frente a la costa de Libia.
Según el fiscal adjunto Rocco Liguori, ambos hombres fueron acusados de favorecer la inmigración ilegal en tanto que además se imputó al capitán el cargo de homicidio múltiple imprudencial en relación con el naufragio.
El capitán y el miembro de la tripulación fueron arrestados a bordo de una embarcación de rescate que trajo a Sicilia 27 sobrevivientes del desastre.